El indiscreto encanto de la política
Un junio complicado para Daniel Noboa
Catedrático universitario, comunicador y analista político. Máster en Estudios Latinoamericanos por la Universidad de Salamanca.
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Junio ha sido un mes difícil para el presidente Noboa, particularmente en su intento de mantener su popularidad y preparar un escenario favorable para su reelección. Diversos temas han puesto en aprietos al Gobierno; a continuación, destacamos los cinco más relevantes.
- Construye sí participará en las presidenciales. Desde el inicio del Gobierno, Noboa evidenció animadversión por esta organización política, especialmente hacia su lideresa, María Paula Romo. En una entrevista, incluso, manifestó que el movimiento “legalmente no debería seguir existiendo”.
Curiosamente, esta declaración se dio días antes de que el juez Ángel Torres dispusiera la cancelación del registro electoral del movimiento por no haber entregado el informe financiero de 2022. Finalmente, el 13 de junio, el pleno del Tribunal Contencioso Electoral falló a favor de Construye.
- Verónica Abad, más cerca de Carondelet. Con 75 votos a favor, la Asamblea Nacional rechazó la petición judicial para enjuiciar a la vicepresidenta de la República. Esta decisión detiene el intento de la Corte Nacional de vincularla en un presunto delito de concusión.
Por otro lado, el Tribunal Contencioso Electoral archivó la denuncia presentada contra Abad por el consejero de participación ciudadana, Juan Guarderas, por presunta infracción electoral grave. Además, la Procuraduría General del Estado se abstuvo de pronunciarse sobre el uso de la licencia sin remuneración del presidente para hacer campaña electoral en 2025, para evitar incurrir en arrogación de funciones.
- La Corte Constitucional tumba los estados de excepción. Según el análisis de los jueces, el Gobierno no justificó la existencia de un conflicto armado interno ni especificó claramente el ámbito territorial y temporal de aplicación. Como resultado, la Corte declaró inconstitucional el estado de excepción que regía en Manabí, El Oro, Guayas, Los Ríos y Santa Elena desde el 30 de abril.
El estado de excepción permite a las Fuerzas Armadas ejecutar labores complementarias a la Policía Nacional, así como limitar algunos derechos y libertades, condiciones que otorgan más herramientas al Gobierno para paliar la inseguridad en el territorio.
- El primer apagón de escala nacional. Debido a la sequía prolongada y a problemas técnicos en la infraestructura eléctrica, en abril comenzaron los cortes programados de energía en el país. Con la llegada de las lluvias a mediados de mayo, el ministro Luque indicó que el riesgo de nuevos apagones era bajo.
No obstante, la noche del 19 de julio, todo Ecuador quedó sumido en la oscuridad. El tráfico colapsó, los proveedores de agua suspendieron su servicio e incluso el metro de Quito dejó de operar.
- Tropezón de Daniel Noboa en The New Yorker. Por ingenuidad o a una deficiente asesoría, el reportaje de Jon Lee Anderson reveló no solo una preocupante falta de discreción con los medios, sino también aspectos controversiales de Noboa relacionados con su personalidad, liderazgo y ácidas opiniones sobre sus homólogos del continent
Ante el riesgo de que estas revelaciones dañen la imagen del presidente, la secretaria de Comunicación, Irene Vélez, aclaró que el testimonio fue "sacado de contexto". Por su parte, la canciller Gabriela Sommerfield incluso sugirió que "el objetivo del artículo era causar daño". Estas declaraciones solo contribuyeron a intensificar la controversia.
Junio ha sido un mes complejo para el presidente Daniel Noboa, caracterizado por desafíos significativos que han puesto a prueba su liderazgo y estrategia política.
Su habilidad para construir narrativas que modifiquen las agendas de discusión ha mitigado el impacto de estos episodios. Sin embargo, a medida que las elecciones se acercan, aumentan los frentes de ataque. Estaremos atentos a las novedades que traiga julio.