Economía y Desarrollo
Moreno se fue sin presentar informe. Lasso intenta ubicarse en el centro
Doctor en Economía, máster en Economía del Desarrollo y en Política Pública. Director general académico de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador.
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Lenin Moreno dejó la Presidencia sin rendir cuentas, y no se sabe si entregó el informe de cumplimiento del Plan Nacional de Desarrollo a la Asamblea Nacional, hace un año tampoco lo hizo.
De esta manera podría estarse violentando la Constitución tanto por parte del Presidente saliente como de la Asamblea Nacional.
El artículo 120, en su numeral 4, establece la obligación de la Asamblea Nacional de conocer y pronunciarse sobre el informe anual del Presidente; y el artículo 120, numeral 7, la obligación de este de presentarlo a la Asamblea Nacional.
¿Será que a la nueva Asamblea, entre acuerdos políticos y búsqueda de espacios, se le olvidó cumplir sus funciones?
¿Será que a la nueva Asamblea, entre acuerdos políticos y búsqueda de espacios, se le olvidó cumplir sus funciones?
Por su parte, Guillermo Lasso asumió la Presidencia buscando ubicarse discursivamente en el centro del espectro político, esta es quizá la expresión de la búsqueda del 'encuentro'. Aunque no queda claro cómo se logrará ni en qué temas.
Es evidente que el encuentro, en el centro, es una necesidad para alcanzar gobernabilidad, sobre todo con Pachakutik, que es el único actor político con capacidad de movilización social, y hacia quienes no escatimó halagos en la figura de la Presidenta de la Asamblea.
El discurso del Presidente entrante se basó en la emotividad, sin dar datos y dejando pocas certezas. Se sabe que la naturaleza del centro es justamente la ambigüedad.
El discurso del Presidente entrante se basó en la emotividad.
Quizá lo único con meta clara fue fijar para los primeros 100 días de gobierno la vacunación de 9 millones de personas. Está bien, no hay duda de que esta es la prioridad, de corto plazo, que tiene el país.
En otros temas, no hubo claridad.
Habló de igualdad de género, pero no señaló cuál será su posición frente a la Ley que se debe discutir para la despenalización del aborto en casos de violación.
Tampoco nombró un Gabinete que dé señales de voluntad y coherencia con sus palabras. Apenas el 29% de sus ministras son mujeres, en los Gabinetes Estratégico y de Seguridad el 0%, en el Gabinete Económico y Productivo el 20% y en el Gabinete de Recursos Naturales el 25%, mientras que tan solo en el Gabinete social se llega al 63% (donde se concentran 5 de las 7 mujeres seleccionadas por el Presidente).
Señaló que el país abre sus puertas a la Alianza del Pacífico y demás acuerdos comerciales, sin señalar cuál será la estrategia para potenciar la producción nacional.
También dijo que respeta al Estado laico, pero que se lo debe reconciliar con las religiones. No explicó cuál era la diferencia que se debe solventar, ni en qué ámbitos de la vida pública se busca esa reconciliación.
La duda surge, porque "reconciliar" según la RAE significa: "volver a las amistades, o atraer y acordar los ánimos desunidos", o bien "en la religión católica, restituir al seno de la Iglesia a alguien que se había separado de sus doctrinas".
Sobre otros temas no se pronunció.
No señaló su posición sobre la seguridad social, cómo fortalecerla, y si se dará fuerza a la propuesta de consulta popular de sus ex-aliados del Partido Social Cristiano (PSC).
Tampoco habló sobre su política de seguridad, de la rehabilitación social y del manejo de centros de privación de libertad.
Ninguna palabra en cuanto a la forma y condiciones con las que se propone aumentar la producción de petróleo, ni si avanzará con la venta del Banco del Pacífico y de la Corporación Nacional de Telecomunicaciones (CNT).
Sobre cómo plantea la erradicación de la pobreza, generar empleo, y de cuándo y cómo se subirá el salario básico a USD 500, tampoco dejó ninguna señal.
En la Asamblea queda el cumplir sus funciones, recibiendo y pronunciándose sobre los informes del gobierno que salió y los que deberá presentar el que inicia; pero, además, al igual que a la sociedad civil, el exigir detalles sobre la implementación de las propuestas que se presentaron y también de las que se omitieron.