Se vienen meses complicados para las finanzas internacionales
Graduado de la Escuela de Negocios Darden de la Universidad de Virginia, socio de la firma ecuatoriana de estrategia y finanzas corporativas Ahead Partners, exasesor McKinsey and Company y ex VM de Comercio Exterior.
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La pandemia del Covid-19 se va transformando en un problema endémico o un riesgo normal en nuestra vida diaria, como lo es, por ejemplo, lidiar con el virus de la influenza todos los años.
Esto significa que el Covid ya no es un riesgo tan determinante para la economía. Un estudio de McKinsey and Company, realizado entre varios ejecutivos, señala que ahora son los problemas en la cadena de suministro/logística y la inflación los principales riesgos para el crecimiento de las economías.
Pero ambos problemas son considerados como transitorios por los tomadores de decisiones globales.
La población global está siendo afectada por el incremento de los precios de productos básicos.
El Banco Mundial, en su encuesta mensual de productos básicos, muestra un incremento de 19% anual en el precio de los alimentos en los dos últimos años.
Por ejemplo, en China en septiembre se elevó el índice de precios para el productor en un 10%.
Este es un tema sobre el que hemos escrito ya en columnas como 'El 2022', 'Alza del costo de las importaciones afectará la Navidad', y 'Suben el pan, el diésel, la madera, el acero ¿Inflación global?'.
El rápido incremento de los precios en la economía global empieza a formar parte de las expectativas tanto de los inversionistas como de los consumidores.
Lo que aumenta la probabilidad de que estos últimos traten de recuperar la pérdida de su poder adquisitivo con base en incrementos salariales que, de ser exitosos, podrían generar las condiciones para una espiral salario-precio y elevar la necesidad de apretar las políticas monetarias y fiscales en países desarrollados, lo que haría subir las tasas de interés en Estados Unidos y la Unión Europea.
En caso contrario, la erosión del poder de compra en los países desarrollados podría afectar el consumo, lo que aumenta la probabilidad de que la recuperación global pierda ímpetu.
En Estados Unidos el índice de precios al consumidor ha subido a una tasa compuesta de 3,4% anual en los dos últimos años, por encima del objetivo de la Reserva Federal que era de 2,0% anual.
En la Unión Europea el alza del índice de precios al consumidor interanual fue de 3,4% a septiembre, sin considerar las recientes alzas de precios del gas natural y de la electricidad.
Los consumidores en Estados Unidos ahora esperan que los precios se eleven un 4,6% el próximo año y un promedio de 3,0% en el próximo lustro, de acuerdo con la encuesta mensual de la Universidad de Michigan.
Cuando los mercados de capitales notan una aceleración de la inflación empiezan a demandar mayores rendimientos en las emisiones de bonos soberanos de los países desarrollados, lo que afectaría el precio de nuestros bonos soberanos y la capacidad del Estado de financiarse en el futuro cercano.
En Ecuador la lenta recuperación, como indicamos en 'Planificando para 2022 en un escenario de recuperación económica lenta', reduce la probabilidad de que el consumo se recupere a niveles comparables al incremento de precios en bienes y servicios importados.
Al final será el estándar de vida de la clase media o sánduche el que se será afectado.
BIZBROKER
Una gran cantidad de emprendimientos espaciales han pedido permiso a la Comisión Federal de Comunicaciones de los Estados Unidos para expandir sus redes de banda ancha, requiriendo la aprobación para casi 38.000 satélites en total.
Amazon, Astra, Boeing, Inmarsat, Intelsat, Hughes Network, OneWeb, SpinLaunch, y Telesat están entre las empresas que solicitan espectro en la banda V, un rango de frecuencia que se piensa usar para proveer banda ancha a nivel global.
"El aspecto más difícil de construir un sistema de banda ancha basado en satélites de baja órbita es adquiriendo espectro, no construyendo y lanzando satélites", según Quilty Analytics.