De -3 a zona de clasificación: lecciones de la Selección para el nuevo gobierno

En sus primeros cuatro partidos hacia el próximo campeonato mundial, la selección ecuatoriana de fútbol masculino pasó de estar hundida en el último lugar con -3 puntos, debido a una injusta sanción de la FIFA, al sexto puesto. Es decir, en zona de clasificación directa.

Pese a que la afición se quedó con sabor a más en el último partido contra Colombia, la Tricolor ha logrado construir un equipo joven y sólido que tiene muchas posibilidades de alcanzar los primeros lugares en Suramérica.

La tabla está muy apretada y todavía hay mucho que mejorar. Sin embargo, este arranque futbolero ha dejado algunas lecciones para el país, y en especial para el nuevo gobierno.

Veamos algunas de ellas:

1.- Al igual que la selección de fútbol, la administración entrante empieza con -3 puntos: la inseguridad, la insostenibilidad fiscal y el frenazo en la actividad económica.

Se podrían agregar muchos más como el Yasuní, el fenómeno de El Niño, la ingobernabilidad, la corrupción y la incertidumbre de la economía internacional, entre otros.

Lejos de amilanarse frente a la adversidad, el nuevo gobierno debería seguir los pasos de los jóvenes futbolistas, que lo están dejando todo en la cancha para recuperar la esperanza, que actualmente está por los suelos.

Para darle la vuelta a una situación tan difícil, el presidente electo necesitará emular a la Selección Nacional con un liderazgo, capacidad de inspiración y mucha transpiración. Es decir, trabajo y resultados.

Su rol principal como conductor del país, será establecer una visión y objetivos concretos y realistas para este corto período.

2.- Una de las decisiones iniciales más importantes será identificar las prioridades en su plan de gobierno y escoger el equipo que tenga la experiencia y capacidad de implementarlo.

En otras palabras, tener clara su estrategia (el plan para alcanzar sus objetivos), su táctica (las acciones que se desarrollarán para lograrlo) y su equipo (quiénes).

Una virtud de los líderes de países, de empresas o de equipos deportivos es entender las restricciones y los cambios de contexto para adaptar su táctica a una nueva realidad. Leer bien el partido, dicen los especialistas.

No siempre es fácil, como parece haber sido el caso de Sánchez en el partido contra Colombia.

3.- Identificar talentos para conformar equipos de alto rendimiento es fundamental. El rol de un DT es sacar lo mejor de la experiencia y habilidades de los miembros de su equipo, y trabajar colectivamente en búsqueda de alcanzar resultados.

El seleccionado nacional está repleto de jugadores de alto nivel y experiencia nacional e internacional. Uno de los casos más comentados ha sido el de Kendry Páez: con apenas 16 años, hizo historia al ser el jugador más joven en participar y hacer un gol para su país.

Algo en común tiene el presidente electo: con 35 años, también se metió en la historia al ser el presidente más joven de la era moderna, aunque todavía no mete goles, a diferencia de Kendry. Juan José Flores fue Presidente en 1830 con 30 años de edad, pero esas eran otras épocas.

4.- Al conformar su equipo de gobierno, Noboa puede aprender mucho de la Selección. Además de arqueros tapa-penales, necesitará una tríada como Hincapié, Torres y Pacho, que eviten goles de la oposición y mantengan la seguridad frente a las amenazas de los grupos ilegales y violentos.

Alguien como Moisés Caicedo será fundamental para que sea su gran operador político, que marque duro en la Asamblea y que reparta balón entre sus compañeros con gran visión ofensiva.

Dada la polarización política imperante, se necesitará un Pervis Estupiñán, que pueda avanzar por la izquierda, y un Ángelo Preciado, que pueda hacerlo por la derecha.

Por supuesto, necesitará goleadores, como el mayor de nuestra historia, Enner Valencia, o nuevas promesas como Kevin Rodríguez.

Tendrán que marcar goles en espacios muy cerrados, difíciles y con el reloj en contra, para avanzar en el sector social, infraestructura, seguridad e inversiones.

5.- Al igual que el DT Félix Sánchez, Daniel Noboa tendrá detractores, recibirá críticas, y enfrentará intereses oscuros y amenazas. Es lo usual en el fútbol y en la política.

La clave será mostrar resultados (meter goles) con eficiencia, transparencia y honestidad, y priorizar siempre el bien público por sobre el privado.

Así como hay tantos comentaristas deportivos que pretenden saber más de fútbol que todos los entrenadores juntos, hay muchos editorialistas, políticos y empresarios que también son opinólogos y pronto estarán dictando prioridades y sugiriendo nombres para el próximo gobierno.

Es comprensible, pues hacen su trabajo. La nueva administración deberá escucharles y respetarles, pues se puede aprender algo, aunque no esté de acuerdo.

Sin embargo, el responsable de las decisiones es el DT. La alineación y la táctica no pueden ser dictadas por los analistas o grupos de poder. Al final, deberá tomar sus propias decisiones.

6.- Ya en el esquema de juego, también hay mucho que aprender de la selección y tal vez la más importante es empezar sin hacerse autogoles.

Algunas propuestas de campaña pueden ser inconvenientes e ilegales, como por ejemplo meterle mano al Banco Central, o irrealistas, como bajar impuestos y otorgar nuevos beneficios.

Esta clase de autogoles erosionaría las posibilidades de alcanzar el apoyo de organismos multilaterales y la confianza de los mercados de capital. Antes de que empiece el partido, será crucial hacer una depuración de sus promesas políticas.

Quedan partidos muy difíciles para la Selección Nacional. El último será en Quito, el 14 de septiembre de 2025, contra Argentina. Tenemos el equipo y las ganas para clasificar al próximo mundial.

Para ese mismo año, Daniel Noboa ya habrá terminado su corto período y sabremos si estuvo o no a la altura para seguir los pasos de la Tricolor.