Leyenda Urbana
Lasso y Nebot, derrotados por Correa. Nueva geografía política en Ecuador
Periodista; becaria de la Fondation Journalistes en Europa. Ha sido corresponsal, Editora Política, Editora General y Subdirectora de Información del Diario HOY. Conduce el programa de radio “Descifrando con Thalía Flores” y es corresponsal del Diario ABC
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Ninguno de los tres estuvo en la papeleta electoral, pero todo giró a su alrededor, al punto de que lo que pasó el domingo habrá marcado su futuro y el del país.
Manejando la campaña a control remoto y poniendo su cara como la imagen de la Revolución Ciudadana (RC5) por la que se batió contra sus enemigos políticos, Rafael Correa ha obtenido un rotundo triunfo en las urnas.
El presidente Guillermo Lasso perdió la consulta popular y Jaime Nebot su ciudad y provincia.
La derrota del Partido Social Cristiano (PSC) en Guayaquil es un terremoto político en grado de desastre. Ha perdido la Perla, epicentro de su modelo exitoso. Las réplicas se sentirán por largo tiempo.
Ya habrá ocasión para comentar las razones para semejante golpe de urna, pero para Jaime Nebot, quien en las últimas semanas volvió a las calles en un intento por evitar la catástrofe que presentían, este debe ser un momento de gran dolor y frustración.
Ya nada será para él como antes. Como ha sido desde hace casi 30 años, en Guayaquil. Y también en provincias como Los Ríos y El Oro, bastiones consentidos. Hoy, se acabó.
Se trata de una derrota moral descomunal que dejará un vacío emocional inconmensurable, para el que hará falta mucho cuajo si se quiere superar.
Lo del presidente Lasso es tan grave; o peor.
Convencido de que el 'SÍ' ganaba en las ocho preguntas por él planteadas, se mostró triunfalista y desafiante y hasta hizo campaña en contra de Cynthia Viteri, devenida en la enemiga política a derrotar.
"No les voy a decir por quién voy a votar (para la Alcaldía de Guayaquil), pero sí por quién no votaré. No votaré por quién ha destruido las finanzas de la ciudad", dijo, sin que nadie le preguntara nada.
¿Qué hará hoy con el trofeo en las manos?
Cosas de la política, el Presidente no podrá celebrar, porque su Gobierno ha recibido un golpe demoledor, no solo porque CREO por poco ha desaparecido como movimiento político de la faz del Ecuador, sino porque está en un callejón sin salida en la Asamblea y en el país mismo.
Los pronósticos más funestos se han cumplido, porque Lasso convocó a la consulta en el peor momento de todos, luego de desperdiciar ocasiones de oro, cuando gozaba de alta popularidad y no solo podía salir victorioso de un referéndum, sino de una muerte cruzada, que le habría dado meses de gobernabilidad mediante decretos y la posibilidad de una reelección, además de tener mayoría en la Asamblea.
Hoy, todo se ha esfumado. Y una niebla otoñal envuelve el panorama. Los fantasmas de la soledad política habitan Carondelet.
Lasso se ha esmerado en cultivar enemigos; la lista va en aumento, nutrida por una suerte de olvido selectivo, de quienes estuvieron a su lado cuando más los necesitó.
Fue el acuerdo con el PSC lo que permitió a CREO llevar a la Lasso a la Presidencia. Y fue ese mismo partido el que, en dos votaciones, en la Asamblea, le salvo de ser destituido. No va más.
En estos instantes, casi sin el riesgo de equivocarse, se puede afirmar que, en materia de gobernabilidad, lo peor está por venir.
La Comisión Multipartidista de la Asamblea que tramita el caso 'Encuentro', más conocido como el 'Gran Padrino', apurará cualquier decisión que implique involucrar al Ejecutivo y sus cercanos.
La Fiscalía hará lo suyo, movida, este momento, por el pronunciamiento en las urnas.
Leonidas Iza buscará cualquier pretexto para calentar las calles. Y si es en mayo, cuando las nuevas autoridades estén en sus cargos, tendrá vía libre para instalarse en Quito.
En un momento de "conmoción social" y con la sangre en el ojo por el recuerdo del apresamiento de Iza, en junio pasado; las denuncias contra los asambleístas de Pachakutik y con el correísmo que no necesitan razones votarán juntos en la Asamblea, donde todo podrá ser puesto en juego, incluso, un juicio político.
Con certeza, los socialcristianos ya no tendrán argumentos para votar en contra.
Correa, que tiene sentencia ejecutoriada, debe estar, ahora, contado los días para que se integre el nuevo Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS), para que elijan a las nuevas autoridades de control y justicia.
Se cumplirían sus anhelos.
Así, una nueva geografía política ha dejado las elecciones y el referéndum del domingo.
En este escenario, a Jaime Nebot solo le queda ponerse de pie, mirar al frente y caminar. Y tratar de reconstruir de las cenizas su partido y movimiento; incorporando a las nuevas generaciones.
Guillermo Lasso, en el despacho Presidencial, sentirá el peso de los errores y, sin cartas sobre la mesa, deberá admitir la derrota, hablarle al pueblo y rehacer su Gobierno.
Cuando pase el tiempo y llegue la reflexión, quizá, un día, Lasso y Nebot admitirán que, por el odio político, finalmente terminaron neutralizándose y dejaron el terreno para que Correa haga de las suyas, y los derrote juntos. ¡Pobre Ecuador!