Al aire libre
Era un gordito feliz, pero sufría por la discriminación
Comunicadora, escritora y periodista. Corredora de maratón y ultramaratón. Autora del libro La Cinta Invisible, 5 Hábitos para Romperla.
Actualizada:
Pesaba 150 kilos -dice Juan Carlos Corral en un 'live' de Instagram-. Me sometí a un procedimiento quirúrgico y logré bajar 70 kilos.
El doctor Fernando Torres, creador de Imago, recibió una llamada de un señor a finales de agosto de 2019, que le dijo:
-Quiero entrenar contigo.
-Bueno, ¿y qué quieres hacer?
-Correr un triatlón dentro de unos tres años.
-¿Y qué has hecho?
-Nada.
-¿Cómo es tu entrenamiento?
-Poco: algo de bici y calistenia.
Juan Carlos tenía una obesidad mórbida.
"Empezamos enseguida" -comenta Fernando- "y ahora no le alcanzamos en la bici. Tiene un poco de sobrepeso, pero ya es otra persona".
Juan Carlos comparte su experiencia:
"Yo me consideraba un gordito feliz, pero había cosas que me afectaban en el lado anímico, de sociedad. Sufría de discriminación, tenía complejos como no poder entrar a comprar ropa en tiendas de Ecuador porque no tenían mi talla.
Mis niveles de sangre estaban en su límite, empezó a subirme la presión y de repente, me dio una trombosis. Entré en una especie de depresión.
Tenía que hacer algo por mí, por mi esposa, por mis hijos.
Tomé la decisión.
Un amigo me metió a un grupo de Facebook de personas que se habían operado. Les conté mi caso y me dieron el teléfono de un doctor. Ahí comenzó a cambiar mi vida. Quise operarme, pero esperé por el riesgo de trombosis.
Pasé por un proceso de reducción de peso. Ya había tratado antes, corría unos kilómetros y bajé 15 kilos, pero me lesioné y volví a subir de peso.
Esta vez bajé unos 35 kilos y empecé a ver mi vida desde otra perspectiva, quise cuidarme.
Uno puede cambiar en la parte física, pero la mental es la relevante".
Según Fernando Torres, Imago es transformación, es la metamorfosis.
"Con el deporte logramos ser mejores personas. No entrenamos para ganar a tal o cual, sino para ser los campeones de nuestra propia vida", dice Torres.
"Poder comprar ropa a mi medida, no saben la satisfacción que me daba. Una vez entré a probarme algo en un vestidor y me quedaba bien. Me senté y me puse a llorar. En mi trabajo también me sentía mejor, eran muchas alegrías que de pronto empezaba a notar", agrega Juan Carlos.
Y continúa "no me gustaba nadar porque era gordo. Además, volver a vestirse era difícil, cómo agacharse para ponerse las medias con la piel húmeda. Empecé a nadar y a correr, pero la bicicleta me conectó mucho más", dice.
"Ahora disfruto hacer deporte, es lo mejor que me ha pasado. Yo me declaro deportista".
Recuerda los nervios al llegar a su primer Gran Fondo de Manta "con mi esposa, quien siempre me ha apoyado. Llamé al doctor Fernando y le dije: estoy nervioso. Me dijo, acuérdate de tu mantra: servir de ejemplo".
"Ahora tengo varios amigos a los que he asesorado para que se operen y lleguen a este sueño de ser más saludables, de tener más esperanza y calidad de vida. Las cosas con decisión se logran. Luego viene la fuerza de voluntad".
Recién corrió la Sierraloma y habla de la libertad que sintió, "la alegría de tener muy buenos amigos, la pasión, la adrenalina. Eso te lo da el deporte. Estoy en un primer peldaño", afirma Juan Carlos.
Ha participado en tres Gran Fondo de 130 y 160 kilómetros, ha hecho montaña, pero, más allá del rendimiento deportivo, está el 'Ritmo Humano' que es el lema de Imago.
El ritmo de vida cambió para Juan Carlos. Rinde mejor en el trabajo, y tiene más energía para la familia.
-Te das cuenta de que todo está fusionado. Lo que está en tus manos hay que hacerlo ahora. El deporte está en tus manos. Darse el beneficio de la duda: empezar a caminar, a nadar, salir en tu bici viejita. Sí se puede.
Y agrega que "al no distraerte en otras cosas, beneficias a la familia. Luego ellos también se unen, les compras bicicleta a tus hijos. Si somos mejores personas, somos mejores ciudadanos".
Sus próximas metas son el Giro de Italia, Mountain Bike Pululahua, Ironman 70.3 en Manta, Gran Fondo Miami en Quito, y en Cuenca, L’ Étape. Tal vez, Chimborazo Extremo.
"Así que, nos vemos en las vías", concluye Juan Carlos Corral.