Firmas
Disney Manabí
Abogado y escritor. Ha publicado varios libros, entre ellos Abraza la Oscuridad, la novela corta Veinte (Alfaguara), AL DENTE, una selección de artículos. La novela 7, además de la selección de artículos Las 50 sombras del Buey y la novela 207.
Actualizada:
Parece que la suerte de la siempre imposible Refinería de El Aromo en la provincia de Manabí está definida. No se hará una en el terreno más caro del mundo, como se ofreció hace muchos años. Y esto nos debe hacer pensar en opciones para usar esa inversión en beneficio del país sin caer, en lo posible, en los usuales errores.
Acabo de venir de un viaje donde por emergencia nos llevaron a una playa en Haití. Y resultó que en esa playa de Haití había una mejor preparación para el turismo que en toda la provincia de Esmeraldas. Y la razón era que lo administraba una empresa privada dedicada al turismo.
Entonces el bicho que tengo desde hace mucho tiempo con respecto a qué hacer en el terrenote aplanado en Manabí se me reactivó.
Y quiero sugerir –otra vez- la búsqueda de los actuales administradores el conglomerado Disney, y que se les ofrezca en concesión el espacio para que construyan un parque de los suyos ahí. Seguramente habrá un agregado comercial en la Embajada en Estados Unidos, como para proponer y tratar este tema.
Estas son mis reflexiones, en desorden, pero juntas creo que hacen sentido:
El terreno nuestro tiene 500 hectáreas, el más famoso parque de Florida que es el Magic Kingdom tiene 150. En esas 150 funciona el parque que el año 2017 recibió a 20,45 millones de personas. (pueden ver más datos aquí).
Alrededor de este parque (y los otros del todo el complejo Disney) funcionan para dar abasto a tanto visitante un sinfín de hoteles, hostales, moteles, restaurantes, otras atracciones, etc.
El puerto de Manta (cercano al terreno) ya está recibiendo cruceros, hay aeropuertos, hay vías y algunos sistemas de agua, y sobre todo, hay cientos de miles de personas en toda Latinoamérica que quisieran ir a Disney pero muchas no consiguen visa para Estados Unidos y otras tienen costos de viaje muy altos.
Yo si veo muy posible que desde Colombia y Perú nos lleguen por vía terrestre algunos miles de vecinos. Me explota la cabeza pensando en las opciones turísticas que se derivan de algo como esto.
Los manabas son gente espectacular que podrían dar una muy buena atención a los visitantes. Y la generación de empleos sería masiva y no solo en etapa de construcción, sino ya en la operación del parque. El tema laboral sin duda será un escollo que resolver, pues algunas de nuestras leyes al tratar de cuidar a los empleados, han causado el efecto contrario.
Pensándolo bien, en las 500 hectáreas se pueden construir dos parques y varios hoteles. Y hasta departamentos y casas vacacionales. Y una zona franca, ya que estamos. Y nada de esto requiere dinero estatal, ni nueva burocracia.
Definitivamente se requieren reformas para que la seguridad jurídica sea suficiente para los inversionistas, que si no son los de Disney, podrían ser los de Universal, o cualquier otra marca mundialmente famosa. No queremos que cada año les extorsionen para “la renovación”, ni nada por el estilo.
Creo que se podrían recuperar algunos cientos de millones de dólares a la firma del contrato. Pues el Estado ya tiene una valoración de lo que realmente vale lo que se hizo ahí y que serán de utilidad para quienes ocupen ese espacio. Por si acaso no estoy diciendo que se abandone la persecución judicial en contra de los saqueadores de los USD 1500 millones originales.
Solo en IVA de los consumidores se cobraría un platal, y a la empresa también en Impuesto a la Renta y algún otro rubro.
Acá nunca han funcionado bien los parques industriales. Y en vista de que esa tierra se compactó usando agua salada del mar, tampoco hay mucho futuro agrícola ahí.
NOTA PARA CIERTOS PERSONAJES: Por favor les pido que no se cojan de esto para crear el Ministerio de la Montaña Rusa, o una Universidad, ni una ciudad inteligente, ni nada a cargo del Estado y que terminará siendo otro saqueo que quebrará antes de inaugurarse.
Eso sería. Tal vez sea una buena idea.