Esto también pasará…
Graduado de la Escuela de Negocios Darden de la Universidad de Virginia, socio de la firma ecuatoriana de estrategia y finanzas corporativas Ahead Partners, exasesor McKinsey and Company y ex VM de Comercio Exterior.
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Hay una historia sobre un rey de Persia que reunió a los hombres más sabios del reino y les preguntó si había alguna frase que fuera siempre cierta, siempre que se pronunciara.
Encontraron una respuesta: esto también pasará.
Pero esta frase, se puede interpretar de distintas maneras: “Weltschmerz”, una palabra alemana que se entiende como una melancolía irremediable provocada por el hecho de que nada en la vida, especialmente nada bueno, puede durar.
O como en Japón, donde el concepto "mono no aware", que existe desde hace siglos, esencialmente se refiere a cómo la conciencia de la no permanencia puede profundizar nuestra comprensión y apreciación de las cosas.
Como escribió el monje budista Yoshida Kenko en el siglo XIV, “la fugacidad de todo es precisamente lo que hace que nuestro mundo valga la pena”. Las cosas no serían hermosas ni interesantes si duraran para siempre.
Y sí, recomiendo ver la reencarnación de la serie Shōgun (将軍). La historia es ficción histórica del año 1600, pero habiendo trabajado en la Tierra del Sol naciente muchas características de la Sociedad perduran.
Recordemos que un Japón derrotado en la Segunda Guerra Mundial, siendo el único país que ha recibido un ataque nuclear, es ahora, con una población de 125 millones, una economía similar a la de toda Latinoamérica.
Y sí, estos tiempos difíciles que pasamos como sociedad, con el pasar del tiempo y con un esfuerzo general y mancomunado, también pasarán.
Pensando en esta columna, tropecé con un artículo de la BBC titulado “Los consejos de una neurocientífica para "deshabituar" el cerebro y evitar situaciones que nos hacen daño”. El artículo es sobre la tendencia de nuestro cerebro a dejar de prestar atención a las cosas que están presentes todo el tiempo o que cambian gradualmente, lo que se conoce como habituación.
Tanto es lo que nos acostumbramos a todo, caso especial en Ecuador, aunque una situación nos haga daño, dejamos de considerarlo tóxico porque se nos ha vuelto una constante, un malsano hábito y carecemos de perspectiva para juzgar su efecto en nuestro diario vivir.
Uno de los consejos que da el artículo mencionado es tener descansos, es decir, “si te alejas de una situación, aunque sea por un corto período de tiempo, puede ser un fin de semana, unos cuantos días o un tiempo más largo, te deshabituarás hasta cierto punto y podrás notar mejor las cosas que te rodean y algunos detalles antes desapercibidos". Consejo que obviamente sigo con esta columna.
Eso nos ocurre también en situaciones placenteras: con el correr del tiempo damos por sentado, lo que nos pasa y esto reduce la intensidad de la emoción que nos solía provocar.
Un truco sencillo consiste en distanciarnos de las situaciones a las que nos hemos habituado, quebrando la rutina e introduciendo cambios.
En el ínterin, basado en el artículo de Reuters “Exclusive: Ecuador examining new Amazon and Ocean linked debt-for-nature swaps” se está estudiando nuevos canjes de deuda por naturaleza, uno para canalizar fondos hacia la selva amazónica y otro para una zona de protección del océano.