Correa promueve a Lasso para la Presidencia. Canciller Valencia se va de vacaciones haciendo cambios en el Ministerio

Lo que faltaba. Ahora, desde Europa, el expresidente Rafael Correa promueve a sus candidatos para las presidenciales de 2021.

Como sabe que no tiene ningún chance de ser candidato por los procesos legales que hay su contra que incluyen, hasta ahora, tres órdenes de prisión, no se le ha ocurrido otra cosa que buscar a sus incondicionales.

En eso se halla, y ya ha hablado de un par de nombres que podrían correr en los comicios que se vienen en Ecuador.

En una entrevista, en días pasados, Correa mencionó a dos de sus más cercanos para que representen a su organización política.

Habló de su excanciller y exembajadora ante la OEA María Isabel Salvador, hermana del actual procurador general del Estado, Iñigo Salvador Crespo, y de Xavier Lasso Mendoza, hermano de Guillermo Lasso Mendoza, líder de CREO, como las figuras que deberían correr por la Presidencia.

“No hay que tener miedo a los desafíos”, le dijo a un incrédulo Lasso, su exembajador ante las Naciones Unidas, quien lo entrevistó.

¿Se imaginan una papeleta electoral con los dos hermanos Lasso Mendoza compitiendo en diferentes casilleros por la Presidencia? ¡Sin comentarios!

Lo interesante de este anuncio (siempre hay algo) es que Correa finalmente admite que no podrá ser candidato a la Vicepresidencia, como era su aspiración, “no puedo regresar al país porque me meten preso”. 

Eso sí, siempre tiene que victimizarse y por eso anticipa que cambiarán el reglamento para que no pueda inscribir su candidatura en un consulado o mediante un poder.

Dice más: asegura que también existe la disposición para que el Consejo Nacional Electoral (CNE) elimine de los registros a Compromiso Social, para dejarlos sin el partido que ya les prestó su casillero.

Compromiso Social es el partido de Iván Espinel, amigo y aliado de Correa, y exministro de Moreno, hoy sentenciado a 10 años de prisión por lavado de activos.

Correa también anticipa que por el caso Chevron y el caso El Universo le pondrán juicios de repetición ya que el Estado no se defendió y “perdimos los juicios”. 

Por lo tanto, anticipa que les darán una compensación (a El Universo), y que le pedirán que pague él y, como no podrá hacerlo, le declararán insolvente. “Es el plan socialcristiano”, dice un temeroso Correa.

Cambiemos de tema y hablemos de la siempre movida diplomacia. El viceministro de Movilidad Humana, Santiago Chávez, renunció a sus funciones, la semana anterior.

Diplomático de carrera, el embajador Chávez ha cumplido una gran tarea, que ha sido reconocida dentro y fuera del país. ¿Por qué se va? Es una incógnita.

En realidad, nadie dice saber por qué dejó su cargo, pero se conoce que será remplazado por Carlos Alberto Velástegui, diplomático de carrera.

También se fusionan la Subsecretaría de Organismos internacionales, actualmente a cargo del embajador Mauricio Montalvo, y la Oficina de Relacionamiento Interinstitucional (Comercio Exterior) dirigido por el embajador Christian Espinosa.

Todos estos cambios se sucedieron cuando el canciller José Valencia estaba por salir de vacaciones; hoy está en pleno goce de las mismas y en su reemplazo está el vicecanciller Andrés Terán.

Del canciller encargado también hay novedades: Andrés Terán pronto dejará la Cancillería, ya que se irá de embajador a Europa. Es más, se conoce que Holanda ya le dio el beneplácito.

Pero hay otra movida que es la comidilla en el Palacio de Najas: El exembajador en México Leonardo Arízaga, quien dejó ese país justo cuando fue el escándalo de la llegada de Ricardo Patiño a la capital Azteca, está de vuelta a la Cancillería y estrena funciones: Es subsecretario de Servicios Consulares.