Necesitamos que haya balance entre lo macroeconómico y lo social
Graduado de la Escuela de Negocios Darden de la Universidad de Virginia, socio de la firma ecuatoriana de estrategia y finanzas corporativas Ahead Partners, exasesor McKinsey and Company y ex VM de Comercio Exterior.
Actualizada:
El Gobierno enfrenta el desafío de encontrar el balance adecuado entre las políticas macroeconómicas para soportar la recuperación económica, lo que incluye reformas legales, especialmente, la tributaria (eliminar el 2% de impuesto a los microempresarios), la reforma laboral y la reforma a la seguridad social.
Hay que incrementar la productividad del país vía cambios en la política de aranceles y del Impuesto a la Salida de Divisas (ISD), la universalidad de normas para bienes e infraestructura, y la reducción de la tramitología, yendo hacia un gobierno digital.
Y es necesario abordar los daños causados por la pandemia, especialmente el incremento de la desigualdad y de la pobreza, que agobia a un tercio la población del país.
S&P’s Global ratings, la prestigiosa calificadora de crédito, indica en su 'Economic Outlook Latin America Q3, 2021' o 'Mirada Económica a Latinoamérica para el tercer trimestre de 2021' que:
Ha incrementado su expectativa de crecimiento para la región por la mejoría en el consumo local de servicios. Sin embargo, se han reducido las expectativas de crecimiento para 2022.
La fuerte demanda de productos básicos en el entorno global ha incrementado los volúmenes de las exportaciones (con la excepción de Chile), pero eso no indica que haya mejoras genuinas de la productividad.
En el caso de Ecuador, la distribución de la volatilidad implícita del precio del contrato del petróleo tipo WTI en el NYMEX lo centra entre USD 65 hasta USD 85.
En ese caso, el potencial ingreso petrolero adicional sería de unos USD 1.000 a USD 1.500 millones dado que Petroecuador debe pagar deudas (carryforwards) e invertir para mantener la producción petrolera estatal en alrededor de unos 400 mil barriles diarios.
En Latinoamérica, los nuevos casos diarios de Covid-19 son en promedio cuatro veces más que el promedio en países emergentes por cada millón de habitantes. Y eso que las variantes delta y delta plus (alrededor de 60% más contagiosas) todavía no se vuelven dominantes en la región, como será el caso en Europa en un mes.
La prontitud de la vacunación es clave, como indicamos en Vacunémonos ya y Recuperar la economía depende del programa de vacunación.
La pandemia también ha afectado a las familias de mediano y bajo ingreso lo que ha incrementado la tensión social y política.
Como sucede en Colombia, donde las calificadoras de crédito S&P y Fitch redujeron la calificación por debajo de nivel de inversión lo que, según el diario La República tendrá cinco efectos, incluyendo la depreciación del peso colombiano, la caída de la inversión extranjera directa en Colombia, etcétera.
Mientras que en Perú, donde los peruanos retiraron alrededor de USD 13.000 millones del sistema financiero.
Tenemos que encontrar el balance necesario para un acuerdo nacional.
BIZBROKER:
Otro efecto negativo de la pandemia, según el New York Times en el artículo titulado '1+1=4? Latin America Confronts a Pandemic Education Crisis' es que una generación de niños de América Latina ha perdido casi un año y medio de escolaridad, lo que mina aún más las esperanzas de lograr una equiparación educativa con Asia.
Es necesario recuperarse para luego mejorar el nivel educativo.