Estas son las tres variedades de microplásticos que ahogan los mares
La mayoría de microplásticos, aquellas partículas menores a cinco milímetros de diámetro, proviene de productos usados todos los días.
Recolección de microplásticos para medir su impacto en uno de los mares de Barcelona, junio de 2022.
Reuters
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Todos hemos leído alguna vez los titulares. “Microplásticos se cuelan en el torrente sanguíneo” o “Ballenas y especies marinas acumulan plásticos en sus estómagos”.
Mientras crece la preocupación por estas micropartículas de plásticos, no mayores a cinco milímetros de diámetro, también aumenta la variedad de fuentes de donde provienen.
Diversos estudios han encontrado microplásticos en la moda sintética y barata, en juguetes, en el labial, la pasta dental, y hasta en el polvo de la atmósfera.
Un nuevo informe, hecho por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), revela que más de un tercio de las fibras de plástico en el mar proviene de telas sintéticas, como el poliéster o nylon.
Otro 28% es generado por los neumáticos que se arrojan al mar o en vertederos de basura. Pero también hay fuentes que los seres humanos jamás lo hubieran pensado, como los cosméticos que están en su baño o el polvo de las carreteras.
Microplásticos del ‘fast fashion’
Fast Fashion o Moda Rápida es un término acuñado para referirse a las prendas de vestir baratas, que se compran con facilidad y luego se botan porque simplemente “pasaron de estilo”. Y en algunos casos, su confección es tan pobre que se daña con facilidad.
La industria de la moda rápida es un mercado gigantesco, valorado en más de USD 99.200 millones y con un crecimiento proyectado del 8,8% en 2022, según la consultora The Business Research Company.
Las empresas del ‘fast fashion’ sacan al mercado nuevos diseños cada mes o trimestre, inundando las vitrinas y los portales de moda.
A la cabeza está Shein, una compañía china que lanza prendas nuevas y baratas cada día en su tienda online.
El impacto de la moda rápida radica en sus textiles como el poliéster, nylon, acrílico y elastano.
Para la fabricación de estos textiles se recurre a materiales derivados de petróleo, que luego terminan en el mar. ¿Cómo llegan a los océanos?
La principal causa es el lavado y decoloración industrial durante su fabricación. Los químicos utilizados en las prendas, según el informe de UICN, se diluyen en las fuentes hídricas sin tratamiento.
Además, como explica el reporte, los microplásticos son tan diminutos que se escapan a cualquier tipo de tratamiento de agua.
Y luego está el proceso de lavado en casa. Un estudio de la Universidad de Plymouth explicó que cuando se lava una prenda sintética a una temperatura de 30 o 40 centígrados, se desprenden hasta 730.000 fibras diminutas de plástico en los sistemas de alcantarillado.
De la atmósfera al mar
Otro hallazgo del reporte de la UICN fue que el segundo tipo de microplásticos más abundante en los mares proviene del polvo urbano.
Este polvo sube a la atmósfera por efecto del viento, para luego bajar hacia los mares.
¿Cómo se genera este polvo? La mayoría es de partículas plásticas que emanan las llantas, cuando el auto frena o acelera. Y por lo general, los neumáticos están hechos de plásticos derivados del petróleo.
Los investigadores del Instituto Noruego de Investigación del Aire (INIA) fueron los primeros en comprobar que pequeños trocitos de plásticos, que llegaban al mar, provenían de restos de ruedas de automóviles.
Y luego un informe de la Universidad de Utah comprobó los cálculos de los noruegos, al detectar que los plásticos habían arribado a parques naturales como el del Gran Cañón, en Colorado.
Los científicos estadounidenses estimaron que casi el 84% de este polvo microplástico viajaba desde las llantas que circulaban en carreteras.
Plásticos en labiales y shampoo
La industria del plástico se remonta a los inicios de 1900, pero no fue hasta 1950 cuando comenzó la producción en masa.
Desde aquel año, más de 9.000 millones de toneladas de metros cúbicos de plásticos se han producido en el mundo, convirtiendo a este material en una parte casi omnipresente de la vida humana.
Están en todas partes, incluso en productos de higiene y limpieza personal como pasta dental, exfoliantes, shampoo, gel de baño, y hasta en los cosméticos.
Un análisis de la organización Greenpeace Italia, hecho en 2021 a 672 productos cosméticos, evidenció que el 79% tenía algún tipo de microplásticos.
La entidad encontró pequeñas partículas de polietileno, nylon y polietileno tereftalato en productos de maquillaje para ojos y labiales.
Estos microplásticos primarios, similares a bolitas diminutas, están presentes también en los productos exfoliantes para el cuerpo o el rostro.
Y en todos los casos, las pequeñas partículas se mezclan con el agua, cuando la persona se lava el rostro o se desmaquilla. Es así como llegan a las fuentes hídricas a través de los sistemas de alcantarillado común.
Muchas empresas grandes ya hacen esfuerzos para eliminar los microplásticos de sus productos, como Unilever o Procter & Gamble.
Si quiere ser parte de la solución, puede revisar si sus cosméticos más utilizados tienen alguno de estos componentes identificados como microplásticos:
- Copolímero de acrilato
- Polímero cruzado
- Poliamida
- Poliacrilato
- Polietileno
- Poliestireno
- Polipropileno
- Poliuretano
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