Minecraft en el aula, el audaz método de un profesor ecuatoriano
El ingeniero y docente de un colegio en Guayaquil, César Vallejo, es un fiel creyente del ‘aprender jugando’, aunque esto implique el famoso videojuego Minecraft.
Uno de los mundos creados en Minecraft para el aprendizaje de inglés, en la Academia Illingworth de Guayaquil.
Captura del videojuego
Autor:
Actualizada:
Compartir:
Minecraft, el videojuego más popular de la historia, es un juego de construcciones. Es sencillo y cualquier puede crear un mundo de píxeles e ir alimentándolo para sobrevivir.
Para lograrlo, el 'gamer' debe echar mano de la creatividad, una habilidad que miles de maestros buscan despertar en sus estudiantes.
Es allí donde el videojuego, comprado por Microsoft al estudio Mojang por USD 2.500 millones en 2014, encaja en el mundo educativo.
Desde 2021, el ingeniero y profesor ecuatoriano, César Vallejo, se arriesgó a usarlo en el aula, como un plan piloto para niños de segundo y quinto grado de educación general básica.
El audaz método de Vallejo comenzó con alumnos de lengua extranjera en la Academia Naval Illingworth de Guayaquil.
“Mi deseo era extender el contacto de los estudiantes con la asignatura por fuera del salón de clases”, dice Vallejo, quien a sus 51 años está convencido de los beneficios de las tecnologías en la educación.
Para él, la tecnología “ayuda a los profesores a ser más eficientes y efectivos en llegar y trasmitir el conocimiento a los estudiantes”.
Su pasión por las TIC (el término corto para Tecnologías de la Información y Comunicación) le significó un reconocimiento mundial.
Es ganador del concurso MIE Expert, un evento educativo promocionado por Microsoft, que reconoce a los docentes del mundo entero que recurren a tecnologías innovadoras en el aula.
Cómo se aprende con Minecraft
El uso de Minecraft en el mundo educativo no es nuevo. Desde que Microsoft lanzó en 2016 la versión educativa del videojuego, MinecraftEDU, miles de docentes lo han incorporado en la educación del siglo XXI.
La manera en que cada docente lo hace, o en la asignatura que lo aplica, marcan la diferencia.
En el caso de Vallejo, el profesor cuenta que empezó con niños pequeños, de siete a 10 años de edad, y confiesa que fue mucho más complicado convencer al padre que al alumno.
“Fue una lucha tremenda, pero era necesaria”, dice Vallejo, quien inició el proyecto con 200 estudiantes y ahora tiene 500 que emplean el videojuego como método escolar.
El maestro utiliza el videojuego en la asignatura de Inglés, y funciona así: en lugar de enviar una tarea escrita para desarrollar en casa o una lectura para aprender palabras de memoria, el estudiante tiene su propio mundo en Minecraft donde práctica el idioma.
Cada alumno se conecta a través de una red privada o de VPN y con su propia licencia del juego, luego construye su mundo, lo hace crecer, participa de tareas y resuelve acertijos.
Además, puede conectarse con otros estudiantes desde casa, para ‘aprender jugando’.
Según la primera evaluación de la metodología en el colegio, el 69% de los estudiantes que usaron Minecraft para la asignatura de inglés tuvieron un mejor rendimiento académico, versus los alumnos que no lo utilizaron.
Vallejo asegura que el potencial de Minecraft es enorme, porque puede ser empleado en asignaturas como Química, Matemáticas, Historia o Ciencias Naturales.
“En Ciencias, el profesor puede pedir al alumno que cree un mundo en Minecraft con vida marina y partir de eso hablar de ecología”.
César Vallejo, profesor ecuatoriano.
Los otros proyectos de Vallejo
Pero Vallejo no fue reconocido por Microsoft solo por usar Minecraft en el aula. También se premió su pasión por las TIC en el aprendizaje.
El docente tiene tres otros proyectos que fueron considerados. Se trata del uso de los programas del Office 365, como Teams y OneNote, que sirvieron para motivar y conectar a los estudiantes de la clase de inglés.
Y con estas mismas herramientas creó que ambiente colaborativo entre estudiantes, padres de familia y profesores del colegio.
Ahora Vallejo cuenta que tiene otros planes: “Pertenezco a un grupo ‘secreto’ que está analizando la inteligencia artificial (IA) para incluirla en proyectos educativos”.
Según Vallejo, la IA es una revolución para el mundo educativo, y no necesariamente porque fomentará el plagio.
“Es una tecnología gratuita que nos podrá ahorrar mucho tiempo en hacer tareas mecánicas”, dice.
Para este profesor ecuatoriano, la IA dará solo información que ya está disponible, pero le seguirá faltando la parte social, el pensamiento lógico y creativo, cualidades que solo las tiene un ser humano.
Compartir: