El live action de 'One Piece' triunfa en Netflix
La nueva serie con actores reales de 'One Piece' es un éxito que rompe la maldición de las adaptaciones provenientes del anime. ¿Por qué funciona tan bien?
Escena de 'One Piece' serie protagonizada por Iñaki Godoy.
Netflix
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Todos los temores y presagios de un desastre han sido disipados. Al contrario de lo que ocurre con las adaptaciones de live-action que fracasaron al meterse con alguna animación japonesa, esta vez 'One Piece' es un éxito absoluto.
La serie con actores reales de 'One Piece', que debutó este 31 de agosto, es alabada por la crítica y los espectadores de Netflix. ¡Por fin se hizo todo bien!
Primero, recordemos la enorme importancia de 'One Piece' en la cultura popular. Se trata de un manga (historieta) que se publica ininterrupidamente desde 1997 y que inspiró una serie de anime, la cual no deja de emitirse desde 1999. Se trata, pues, del manga más vendido de la historia y de la serie con más episodios (ya van 1073) de todos los tiempos.
Creados por el dibujante japonés Eiichiro Oda (hoy con 48 años), los personajes de 'One Piece' han cautivado a una legión de seguidores por todo el mundo.
Y ahora, los fans pueden contemplar una serie de actores reales digna de la saga, algo que no pueden presumir, por ejemplo, los seguidores de 'Los caballeros del Zodiaco', en el ámbito de las películas, y 'Cowboy Bebop', en las series.
Estas son las razones del éxito de 'One Piece' con actores de carne y hueso:
- 1
Supervisión de lujo
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Eiichiro Oda, el creador de 'One Piece', tiene mucho poder en las decisiones artísticas de esta adaptación. Eso garantizó que no se tomasen licencias creativas que alteraran el sentido de este universo de estrafalarios piratas. Si hay un cambio, es porque fue inevitable.
- 2
Fiel al original
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La esencia del relato original está presente, al punto que varios planos considerados emblemáticos se adaptaron fielmente. Por ejemplo, ahí está la mítica escena en que Shanks Le Roux regala el sombre de paja a Luffy, el protagonista de 'One Piece'. Los detalles de vestuario también contribuyen a sostener esta sensación de fidelidad con la serie original.
- 3
Presupuesto generoso
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¡Netflix ha gastado en cada episodio como se trata de la recompensa que se pide por Akagami no Shanks! Claro, el dinero no reemplaza al talento, pero el presupuesto (se estima que cada episodio costó USD 17 millones) permitió crear un producto cinematográfico, con efectos especiales de primer nivel.
- 4
No es para expertos
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Un enorme acierto es que esta serie puede ser disfrutada por un público ajeno al universo de 'One Piece'. No hace falta haber visto ni un capítulo del anime para entender de qué va la historia. Eso sí, quizás despierte en el espectador el apetito de conocer más sobre los personajes. Y bueno, hay más de mil episodios para saciarse.
- 5
Una serie oportuna
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Este live-action sale a la luz cuando está pasando algo crucial: el manga comenzó su cierre. Después de 106 volúmenes, Eiichiro Oda está revelando los secretos escondidos en una historia que acabará definitivamente en... ¡cinco años! Por eso, se ha despertado este apetito por 'One Piece'.
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