Diez películas para ver con los niños en vacaciones de fin de año

Inspirada en el libro 'Charlie y la fábrica de chocolate', de Roald Dahl, esta película cuenta los inicios chocolateros del personaje Willy Wonka. Está repleta de colores, canciones y momentos divertidos. Lo más significativo es que el Wonka de esta versión, a diferencia de las anteriores películas, está lleno de ternura y optimismo. En cines.

Esta secuela de la maravillosa película del año 2000 es impecable desde lo técnico, sobre todo gracias a estos muñecos creados con plastilina, pero animados con tecnología actual. La historia combina la aventura con las bromas, en especial el slapstick que siempre funcionan para los más pequeños. Pero, para los más grandes, el guion ofrece un poco de alegoría política, propia del humor británico. En Netflix.

El estudio Illumination vuelve a sorprender con esta película que, con el pretexto de la migración de los patos, toca el tema de los problemas que afectan a una familia cuando sus integrantes no logran conciliar sus intereses. Colorida, chistosa y con escenarios bellamente realizados, es ideal para que la disfruten los pequeños. La banda sonora también es un acierto. En cines.

Es verdad que esta película puede atraer más a los fans de Digimon que al público menos familiarizado con esta zaga japonesa. Pero la película es disfrutable por las aventuras y, sobre todo, la calidad de la animación. Los niños más grandes la apreciarán mejor por sus mensajes sobre la amistad, relación interpersonal y la madurez. En cines.

Esta película puede desconcertar a los adultos, porque existe la sensación de que son el verdadero público al que apunta esta historia de una largartija que toma conciencia de su mortalidad. Pero no se confundan: más allá de los chistes básicos y canciones, hay una moraleja para niños y mayores sobre qué hacer con lo que nos resta de vida. En Netflix.

Sí, se esperaba más de la película que debía celebrar el centenario de Disney, pero tampoco es un desastre. Esta historia, sobre una joven que descubre la manipulación que ejerce su amado rey, ofrece momentos de calidez y de genuina diversión. Lo mejor: la colección de referencias a la historia de Disney. En cines.

A propósito de Disney, esta película germano-noruega sigue los patrones del clásico Walt, con canciones y un mensaje edificante. Cuenta la historia de un valiente gorrión que se enfrenta a unos malvados marabús africanos. Ideal para los más pequeños. En cines.

Esta historia, con una animación de buena factura y escenas de acción dignas de cine, es protagonizada por Kara Zor-El, la prima de Superman. Cuenta los orígenes de Supergirl y cómo termina relacionada con la Legión de Superhéroes del siglo XXX. Hay una escena post-créditos que augura lo que vendrá en 2024 en cuanto a Superman y sus amigos. En HBO.

Se trata de una película ruso-húngara que reinterpreta la historia del Cascanueces, pero con comicidad y apuntando a los más pequeños de la casa. El trabajo en equipo y la lealtad son los valores que predominan en esta propuesta que también evoca al flautista de Hamelín. En cines.

No es una película sino una miniserie, pero puede considerarse un largometraje en toda regla. Aquí no aparecen las peleas típicas de Pokemon y la animación es una delicia, basada en esculturas de plastilina y stop-motion. Además, es muy dulce y es imposible no encariñarse de Haru, la concerje. En Netflix.