La vida del jugador Gabriel Cortez ha estado marcada por líos criminales
Antes de ser vinculado al crimen organizado, el futbolista ya convivió de cerca con la guerra del narcotráfico: su hermano y su cuñado fueron asesinados.
El futbolista Gabriel Cortez tras ser detenido la madrugada del 22 de abril de 2022, en Guayaquil, como parte de un operativo policial para desarticular a la banda de Los Tiguerones.
Ministerio del Interior
Autor:
Actualizada:
Compartir:
Plantones, escritos judiciales y entrevistas en medios de comunicación. Estas son las estrategias de la familia de Gabriel Cortez para lograr el traslado del futbolista a la Cárcel 4, en el norte de Quito.
Su madre, Elsa Casierra, teme por la vida de su hijo. El 22 de abril de 2022, Cortez, junto con otras 17 personas, fue detenido en un operativo contra la estructura de la banda narco delictiva Los Tiguerones.
Luego de la detención, Patricio Carrillo, ministro del Interior, aseguró que el jugador profesional "era quien ordenaba y recibía información respecto a las personas a las que los sicarios privaban de la vida".
Cortez y los demás detenidos fueron procesados por delincuencia organizada con fines de tráfico ilícito de drogas. Según los archivos del Sistema Informático de Trámite Judicial (Satje), el juez del caso dispuso que el deportista vaya a la Cárcel 4 de Quito y guarde prisión preventiva.
Sin embargo, el traslado nunca se concretó. Primero, Cortez estuvo detenido en un área transitoria de la Cárcel de Esmeraldas, provincia en la que se sustancia el caso.
Y el domingo 24 de abril, fue llevado a la Penitenciaría del Litoral, donde está detenido hasta ahora. Cortez está en el Pabellón 8, controlado por Los Tiguerones. Incluso, en redes sociales circulan videos en los que se lo ve jugando fútbol.
Las autoridades no han revelado las razones para ese trasladado. Aunque, de manera extraoficial, una fuente de la Policía dijo que hay varias alertas de posibles atentados en un eventual viaje a la capital.
Por esta razón, el cambio a Guayaquil se hizo de imprevisto, sin notificación ni a la familia y bajo un fuerte contingente de seguridad.
Miedo justificado
El temor de la madre de Cortez no es solo porque es una figura pública, sino porque su familia ya ha sido golpeada dos veces por muertes violentas asociadas al crimen organizado.
El 25 de enero de 2021, en el barrio 5 de junio de Esmeraldas, asesinaron a Carlos Cortez, hermano del futbolista. El móvil del crimen había sido una venganza.
Dos años antes, Carlos Cortez había sido vinculado a una investigación por un presunto asesinato. Aunque fue sobreseído, alias Chueco y alias Pichi decidieron tomar venganza por mano propia y lo mataron.
El 28 septiembre de 2021, en cambio, en la Penitenciaría del Litoral asesinaron a Jorge Mojarrango Cox, cuñado de Gabriel Cortez. Ese día en esa prisión hubo una masacre, a 122 reos los asesinaron.
Según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), los incidentes se originaron en un intento por tomar un pabellón motivado por el "control por dominar".
En los enfrentamientos, fueron asesinadas personas que “habrían traicionado” a sus grupos de pertenencia, entre las que se encontrarían, aproximadamente, 35 integrantes de Los Choneros, banda rival de Los Tiguerones.
Incluso, información policial reservada indica que la matanza se dio luego de que Los Choneros celebraron el cumpleaños de alias JR, uno de sus cabecillas (recientemente liberado por un habeas corpus).
El 'alarde' de la celebración habría desatado la furia de las bandas de Los Tiguerones y de Los Lobos, cuyos líderes estarían a punto de ser reubicados en otras cárceles.
Antes, dos hermanos de Mojarrango Cox también fueron asesinados: uno en Quito, en 2018, y otro en otra revuelta en la cárcel de Esmeraldas, a inicio de 2021.
Incluso, según Elsa Casierra, el mismo Gabriel Cortez fue objeto de un atentado en 2021, cuando se movilizaba desde Rioverde a Esmeraldas. Y varias veces ha recibido amenazas de muerte.
Cortez tuvo una realidad conflictiva
Antes de ser detenido, Cortez vivía su mejor temporada en lo deportivo. En 14 partidos con Barcelona había anotado siete goles. Su mejor racha luego de 2015, cuando marcó 12 veces en 37 apariciones con Independiente del Valle.
Cortez, de 27 años, llegó a Barcelona en 2021. En las tres temporadas anteriores militó en Emelec, Guayaquil City, Botafogo (Brasil) y Lobos Buap (México). En esos tres años marcó solo dos goles.
Antes, entre 2012 y 2017, jugó para Independiente del Valle. En ese equipo se convirtió en profesional. Pero, su camino empezó antes.
Cortez nació y creció en Puerto Limón, uno de los barrios más violentos y conflictivos de Esmeraldas, conocido como Parada siete.
A diferencia de su hermano y su cuñado, que se quedaron en Esmeraldas y murieron en líos relacionados con la delincuencia, a los 13 años Gabriel Cortez viajó a Guayaquil. En esa ciudad logró vincularse al equipo Norteamérica. Sus dirigentes le buscaron un lugar donde vivir.
Cortez jugó en ese equipo dos años, hasta que en 2010 su talento impactó a los directivos de Independiente del Valle. En ese año se mudó al complejo de ese club en Sangolquí, al sur oriente de Quito, donde vivió y estudió. En 2012, con 17 años, debutó como profesional.
Uno de los objetivos de Gabriel Cortez era ser profesional para ganar dinero y ayudar a su tío que, desde 2008, estaba preso por tenencia de drogas. En 2014, finalmente, su familiar recuperó la libertad.
Pero, ocho años después, Cortez terminó tomando su lugar en la prisión.
Compartir: