Comida, grilletes y arreglos en la Peni, en el plan de inversiones del SNAI

El Plan fue aprobado por el Servicio de Atención a Personas Privadas de Libertad (SNAI), el 14 de enero de 2022. En este documento se incluyen los bienes, servicios, obras y consultorías que la entidad se plantea adquirir en el año.

El SNAI prevé destinar sus recursos hacia 112 rubros, que representarían un desembolso de USD 70,7 millones. La mayor parte se utilizará para la contratación de servicios. Luego aparecen los bienes, las obras de infraestructura y, por último, las consultorías.

Sin embargo, que estén incluidos en el Plan Anual de Contrataciones no garantiza que la inversión se concrete.

El 98% de las contrataciones previstas por SNAI está ligado a proyectos de inversión. Y todavía es incierto que exista el financiamiento para estas iniciativas. En muchos casos, cuando no hay los fondos, los proyectos se relegan para los años siguientes.

El otro 2% del PAC corresponde a gastos corrientes, que son los destinados para adquirir bienes y servicios necesarios para el desarrollo de las actividades de la entidad.

Lo más costoso

Aunque son 112 las contrataciones que el SNAI pretende hacer en 2022, el 87% de los USD 70,7 millones se agrupa en los 10 procesos más grandes.

Y más de la mitad del presupuesto global se destinará a la licitación para la contratación del servicio de alimentación para los presos: USD 41,9 millones.

Y ese proyecto es el mejor ejemplo de que no siempre los planes en la SNAI se cumplen.

Desde enero de 2020, el organismo ha presentado cuatro procesos de contratación del servicio de alimentación para las cárceles, pero ninguno se ha concretado. Todos se han declarado desiertos por problemas con la empresa Lafattoria, la actual proveedora.

Esta empresa ha monopolizado la alimentación penitenciaria desde 2012, sumando más de 19 millonarios contratos. Y aunque no hay un contrato de por medio sigue brindando el servicio por medio de órdenes de pago.

En la lista de proyectos para 2022, también está la adquisición de nuevos grilletes electrónicos por más de USD 4 millones; y dos proyectos por más de USD 3 millones, cada uno: el primero para los arreglos en la Penitenciaría del Litoral y el segundo para la compra un escáner de seguridad.

USD 8,8 millones en infraestructura

A través del Decreto Ejecutivo No. 280, el 3 de diciembre de 2021, el presidente Guillermo Lasso entregó a SNAI las competencias para construcción, adecentamiento, restauración, adecuación y modificación e incorporación de infraestructura carcelaria.

Por esta razón, en el PAC 2022 la entidad destinó USD 8,8 millones para este tipo de contrataciones. En total se plantea hacer 15 obras.

Solo una es por gasto corriente. Es decir, está garantizada. Se trata del mantenimiento en la Cárcel de Turi (Cuenca) por USD 10.607. Las otras 14, en cambio, dependerán de los fondos de inversión disponibles.

El 68% del monto destinado a obras está asignado a la Penitenciaría del Litoral. Esta fue la más afectada por los desmanes ocurridos en 2021.

En julio de 2021, Fausto Cobo, exdirector del SNAI y actual director de Inteligencia Nacional, ofreció transformar a la Cárcel de Latacunga en un búnker para evitar nuevas fugas, amotinamientos y masacres. Pero para este centro solo se destinan USD 185.592.

Otro de los ofrecimientos del Gobierno había sido rehabilitar La Roca y ubicar en esa cárcel a los presos de mayor peligrosidad: para ese centro solo se ha presupuestado USD 111.642.

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