El 49% de los presos solo tiene educación básica y la mayoría son jóvenes
Antes de ser detenidos, la mayoría era comerciante, albañil o jornalero. Esos son algunos de los datos del perfil del recluso ecuatoriano, según una caracterización hecha por el Gobierno.
Un grupo de presos del CAI Esmeraldas posan en la inauguración del proyecto Hincha de mi barrio, el 19 de febrero de 2022.
Twitter / @SNAI_Ec
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Todavía sin fecha para el censo oficial de la población carcelaria, el Directorio del Organismo Técnico de Sistema Nacional de Rehabilitación Social (DOT) desarrolló una caracterización de los presos en el país.
Este fue uno de los principales insumos para la política de rehabilitación social, que se presentó el pasado lunes 21 de febrero.
Según el documento, para establecer la caracterización, se utilizaron las cifras y bases de datos disponibles en el Servicio de Atención a Personas Privadas de la Libertad (SNAI). Aunque el DOT reconoció que estas estadísticas "no resultan del todo fiables".
El SNAI tenía información sobre 261.656 presos. Pero, se excluyeron los registros de las personas que ya salieron de las prisiones, que tienen boletas de excarcelación y otras que por otras razones, como el fallecimiento, ya no forman parte del sistema penitenciario.
De esta manera, la caracterización se hizo con los datos de 40.108 detenidos, con corte a noviembre de 2021. Aunque, en algunas variables los registros son de meses anteriores.
El perfil de los presos
Las cifras utilizadas por el Directorio del Organismo Técnico de Sistema Nacional de Rehabilitación Social (DOT) se pueden dividir en dos áreas:
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Identidad
Se estableció que el 94% de los detenidos son hombres y solo el 6% son mujeres.
Sobre las edades, la caracterización ratifica que los presos en Ecuador son -sobre todo- jóvenes. El 44% tiene entre 18 y 30 años y el 31% entre 31 y 40 años. Es decir, más de la mitad de los presos está en plena etapa productiva.
Otro dato es el estado civil. El 56% está soltero y hay un grupo de 15.788 detenidos que están casados o en unión libre y de hecho.
La caracterización también abordó dos nuevas variables que no se habían analizado sobre los presos. La primera es que el 99% de los reclusos es heterosexual. Hay una minoría de 124 personas que tienen otras orientaciones sexuales e identidades de género.
La segunda nueva variable es la de autoidentificación étnica: el 89% de los reclusos se perciben como mestizos.
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Educación y oficios
Otra realidad que ratificó la nueva caracterización de los presos es que su nivel de instrucción es, en general, bajo.
Más la mitad de la población carcelaria no cuenta ni con instrucción básica. Solo cuatro de cada diez tiene instrucción básica superior, secundaria o bachillerato. Y únicamente el 2,7% cuenta con estudios universitarios.
También se estableció una lista de los oficios que los presos ejercían antes de su detención. Entre los hombres hay más comerciantes, albañiles y jornaleros. Y entre las mujeres resaltan las amas de casa y las comerciantes.
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