Este es el perfil criminal de alias 'JR', según el SNAI
Junior Roldán, alias 'JR', no presenta alteraciones psicopatológicas, a pesar de las sentencias por asesinato que pesan en su contra, dice el informe del Servicio de Atención a Personas Privadas de Libertad.
Los vocales destituidos del CPCCS, durante la audiencia de acción de protección, este 7 de diciembre de 2022.
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Junior Roldán, alias ‘JR’, ha sido reconocido por las autoridades como uno de los dos cabecillas de la banda delictiva Los Choneros, un cargo que asumió a sangre y fuego después del asesinato de José Luis Zambrano, alias ‘Rasquiña’.
Las masacres carcelarias ocurridas a inicios de 2021 fueron consecuencia de esa disputa de poder, cuando las bandas criminales, aliadas a Los Choneros, no estaban de acuerdo en que alias ‘JR’ asuma el liderazgo de las organizaciones.
En Fiscalía, Roldán tiene 11 denuncias por asesinato y en tres de esos casos tiene sentencia. Otras tres por delincuencia organizada, una por extorsión y dos por daño de bien ajeno.
Sin embargo, el Informe de Proclividad Delictógena que realizó la Comisión de Diagnóstico de la cárcel Regional del Guayas evaluó positivamente al privado de libertad Junior Roldán.
Algo que llama la atención del psicólogo y perito forense, Segundo Romero, porque una persona “que ha sido reincidente en delitos, tiene un trastorno antisocial o rasgos psicopáticos”, como es el caso de alias ‘JR’.
Según Romero “estos rasgos psicopáticos los tienen aquellas personas que siempre están infringiendo las leyes, son mitómanos, les gusta apropiarse de cosas, manipuladores, les gusta utilizar una doble fachada ante la sociedad”.
La evaluación realizada por el SNAI avaluó la personalidad delictiva de alias ‘JR’ en base a los siguientes factores:
- Lógica Jurídica +1; es decir, “que tiene conocimientos jurídicos, que sabe diferenciar entre lo que es bueno y malo”, analiza Romero, y aclara que “el psicópata lo sabe, pero no tiene remordimiento”.
- Personalidad +1; que no tiene ningún trastorno de personalidad.
- Criminodinamia -1, se refiere a la relación que tiene el privado de libertad con el crimen, los factores biológicos, sociales o psíquicos que influyen en un individuo a la hora de cometer un delito. “Y él fue evaluado con -1, lo que deduzco que es positivo para su expediente, es decir que él ya no tiene relación con los crímenes que cometió, que su mente no está enfocada en situaciones de violencia”, dice Romero.
- Influencia Victimológica -1, “es decir que no ha tenido una relación con las víctimas a las que hizo daño”, añade.
- Reacción Social -1, analiza su comportamiento con la sociedad.
- Adaptación +1, que es una persona adaptable, “pero el comportamiento de los psicópatas los hace adaptarse. Aunque se incomoden, se adaptan. Porque saben que es consecuencia de sus propios actos, saben lo que hacen, lo disfrutan, pero no tienen remordimiento”, explica Romero.
La conclusión del SNAI es que “el privado de libertad reviste de mediana peligrosidad delictógena al momento de cometer un delito”.
Y en menos de dos meses después, Roldán fue catalogado como un preso de mínima peligrosidad, según el informe, porque “ha realizado los ejes de tratamiento, incluidas las actividades de salud mental".
Así lo suscribieron Aminta Loor, de Trabajo Social; el psicólogo clínico, Samuel Gaibor, y Marlen Loor Mero, del departamento Jurídico de la cárcel Regional de Guayaquil.
El psicólogo forense considera que hay irregularidades en la evaluación del SNAI, porque concuerda con la situación carcelaria de alias ‘JR’.
Para que la Policías pueda realizar operativos de control en la cárcel Regional, donde los cabecillas de Los Choneros tienen privilegios, lo deben hacer con un importante contingente de grupos de élite y militares.
Esto también lo corroboraron hace ocho meses miembros de la Comisión de Pacificación Carcelaria que se reunieron con alias ’JR’, quienes describieron que para el encuentro debieron pasar por los controles de seguridad establecidos por el mismo preso.
Además encontraron toda clase de armas y hablaron de los delitos de corrupción que se viven en la cárcel, donde las bandas han pagado hasta USD 1 millón para ingresar armas.
Sin embargo, el informe psicológico que presentó el SNAI sobre alias ‘JR’, y del que no se ha pronunciado, concluye, además, que “se muestra reflexivo ante el delito por el cual fue acusado y no presenta alteraciones psicopatológicas”.
“Eso es imposible, incluso por el impacto de vivir las masacres en las cárceles, una persona no puede cambiar en tan poco tiempo. Si logra rehabilitarse será después de un tratamiento que duraría años y alejado de ese ambiente delictivo”, explica Romero.
Y así ocurrió. Alias ‘JR’ fue detenido cuatro horas después de haber logrado su prelibertad, cuando iba en una caravana de 10 vehículos con sus escoltas, que portaban armas sofisticadas y granadas, una de las cuales fue lanzada a los policías que realizaron el operativo.
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