Las movidas del 'Mago' Chérrez para anular el caso Decevale

La recusación a la jueza titular Gianella Noritz ha sido el 'as bajo la manga' de la defensa del intermediario financiero Jorge Chérrez y de once exfuncionarios del Depósito Centralizado de Compensación y Liquidación de Valores (Decevale).

La Fiscalía los investiga por supuesta falsedad de información derivada de las operaciones irregulares de los fondos del Instituto de Seguridad Social de la Policía (Isspol), que han puesto en riesgo más de USD 900 millones de la Institución invertidos entre 2014 y 2019.

Además de Chérrez, quien fue asesor financiero del Isspol, también están procesados los exfuncionarios del Decevale Rodolfo Kronfle, Carlos Carbo, Maryuri Zamora, Sonia Bonilla, Karen Carrillo, Roberto Carrión, Minnie Dougherty, Alexandra Martínez, Gonzalo Navarro, Oriana Rumbea y Luis Álvarez.

La primera recusación contra Noritz fue planteada por Oriana Rumbea, exgerente de Decevale. El conflicto se originó porque Joseph Noritz insistía en defender a Rumbea, pese a que es primo de la jueza titular.

Sin embargo, este pedido no prosperó y el proceso continuó hasta septiembre de 2022, cuando el abogado de Chérrez, Pablo Lizarzaburu, presentó otra recusación contra Noritz por considerarla "enemiga manifiesta" de su defendido.

El caso quedó en manos del juez subrogante Francisco Mendoza, hasta que se resolviera la situación de Noritz.

El 6 de diciembre de 2022, la jueza Yesenia Hidalgo negó el pedido de recusación, pese a la insistencia de la defensa de Chérrez, que incluso pidió una aclaración y ampliación del fallo, que también fue rechazado.

La persistencia por recusar a Noritz hizo que la jueza Hidalgo ordenara "que se remita atento oficio al Consejo de la Judicatura, a fin de que se investigue la actuación del abogado Pablo Lizarzaburu Castillo dentro del presente expediente".

De inmediato, Hidalgo dispuso informar a las partes, pero la Secretaría no incluyó entre los destinatarios al juez Mendoza, sino solo a Lizarzaburu y a Noritz.

Mendoza fue notificado recién el 8 de diciembre, justo cuando iba a dirigir la audiencia de revisión de medidas planteada por el exgerente de Decevale, Carlos Carbo Cox, así que dejó sin efecto la diligencia y devolvió el caso a la jueza titular.

Peligró el dinero del Isspol

El dinero del Isspol se destinó a siete tipos de operaciones, entre las que figuran un swap o permuta financiera, un reporto con pacto de recompra y cesiones de derechos fiduciarios.

La Fiscalía sospecha que Chérrez intenta dilatar el proceso contra los implicados, ya que la recusación contra Noritz para que un nuevo juez asuma el caso Decevale pudo anular todo lo actuado en 18 audiencias, que comenzaron en diciembre de 2021.

El Decevale es la institución encargada de realizar la compensación, liquidación y custodia de los valores negociados en las bolsas de valores de Guayaquil y Quito.

Incluso el fiscal César Suárez sostiene que la estrategia de los abogados es lograr la prescripción del caso "para que no existan culpables".

Además puso en riesgo la disponibilidad de los fondos del Isspol por USD 291,75 millones, es decir USD 263 millones en bonos y USD 28,75 millones en efectivo, dinero que ya fue recuperado por el Isspol.

Estos fondos estaban en una cuenta de Citibank NA Nats Cumco LLC, en el Banco Central de Ecuador.

El director del Isspol, Renato González, explicó que "el Citibank exigió que los bonos sean depositados en una cuenta en Ecuador, a nombre de Nats Cumco, para emitir los GDN (Global Depositary Notes o notas globales de depósitos) en Nueva York".

Pero los GDN, dice González, no los reclamó el Isspol sino Jorge Chérrez, quien permanece prófugo de la justicia. Las autoridades sospechan que está en México.

Así, la jueza Noritz retomó la competencia del caso Decevale y en los próximos días resolverá sobre el levantamiento de la medida cautelar de retención de los USD 291,75 millones del Isspol, lo que le permitirá recuperar finalmente la disponibilidad de esos recursos.

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