Caso Las Torres: seis testigos protegidos hablan bajo juramento

Raúl De La Torre, es sobrino del excontralor Pablo Celi y exfuncionario de Petroecuador. En 2019 fue arrestado en Miami con dinero en efectivo, junto a Roberto Barrera. Ambos fueron acusados de conspirar y acordar una transacción financiera conraria al comercio interestatal y extranjero. En el juicio en Estados Unidos, De la Torre aceptó que en ese país lavó el dinero obtenido por el cobro de sobornos relacionados con actividades ilícitas en Petroecuador. Fue sentenciado a un año de cárcel, cumplió la pena en ese país y ahora reside allí. Su testimonio permitirá conocer quién le pidió que cobrará los sobornos y quién se benefició de esos dineros.

De la Paz es el principal accionista de Nolimit. También fue sentenciado por lavado de activos en Estados Unidos. El empresario confesó haber pagado USD 8,8 millones en coimas por los contratos de Petroecuador. En abril de 2019, De la Paz fue sentenciado a tres años de cárcel en Estados Unidos. Pero, en junio de 2021, su condena se ajustó y salió con libertad bajo palabra. Ahora, desde Washington contestará quiénes le exigieron los sobornos y a quiénes le pagó.

Pedro Crespo es otro de los accionistas de la compañía Nolimit. Entre 2012 y 2019, además, fue director de Proyectos de esa empresa. Manejó la ejecución de todos los contratos entre Nolimit y Petroecuador. En 2012, Crespo consiguió acercarse a la estatal petrolera a través de una amistad que tenía con Marcelo Reyes, asesor de Carlos Pareja Yannuzzelli. Gracias a ese vínculo, Nolimit se hizo de su primer contrato por USD 35 millones. Y Armengol Cevallos, quien ya fue sentenciado en Estados Unidos por el pago de sobornos en Petroecuador, le exigió una comisión del 14% de ese monto. En los siguientes años, Petroecuador y Nolimit firmaron varios contratos. Y Nolimit siguió pagando sobornos a través de personajes como Álex Bravo y Arturo Escobar, también sentenciados en Ecuador y Estados Unidos. A finales de 2018, ya cuando Pablo Flores gerenciaba Petroecuador, Raúl De la Torre y Roberto Barrera se pusieron en contacto Crespo y los demás representantes de Nolimit. De la Torre y Barrera les ofrecieron gestionar los pagos que Petroecuador tenía pendientes. Solicitaron una comisión del 20% por el pago de esas planillas y el 15% para reactivar un contrato que estaba suspendido. Crespo participó de reuniones en Ecuador y en Estados Unidos con De la Torre y Barrera, quienes aseguraban que eran emisarios de Flores, para coordinar los pagos de los sobornos. En su versión libre, Crespo dijo que los beneficiarios finales de esos sobornos eran Esteban Celi, hermano del excontralor Pablo Celi, Pablo Flores, exgerente de Petroecuador, y José Agusto, exsecretario de la Presidencia.

Saa Guarderas fue gerente general de Nolimit entre 2016 y 2019. En su versión, recordó que Petroecuador adeudaba mucho dinero (alrededor de USD 50 millones) a Nolimit y la situación financiera de la empresa era difícil. José De la Paz le presentó a Raúl De la Torre y a Roberto Barrera. Aunque no lo escuchó directamente, De la Paz le comentó que De la Torre y Barrera solicitaban un porcentaje de comisión para viabilizar el pago de cada factura pendiente. "A mediados de abril de 2019, se me informa a través de De la Paz que había recibido un mensaje del señor Roberto Barrera manifestándole que debía entregarle el 20% de una planilla y que eso era para el número uno (Pablo Flores)", relató Saa Guarderas. Saa Guarderas también participó de las reuniones en Ecuador y Miami, en las que De la Torre y Barrera exigieron los pagos de Sobornos.

En 2013, Robles ingresó a Nolimit como gerente de Procura. Estuvo en ese cargo hasta mediados de 2019. Además, a mediados de 2014, Robles constituyó en Estados Unidos la compañía Monay Industries, que se dedicaba de manera independiente a dar el servicio de procura a Nolimit. Por pedido de De la Paz, a través de Monay, Robles hizo transferencias por USD 7,3 millones a diferentes cuentas en bancos extranjeros. Nunca supo los motivos de los pagos. En 2019, Petroecuador debía dinero a Nolimit, y De la Paz le solicitó a Robles que lo acompañara a una reunión con Raúl de la Torre y Roberto Barrera. En esa cita se enteró de que se exigían sobornos a cambio del pago de las facturas atrasadas de la empresa. Robles grabó esa conversación. Esa grabación ya está en poder de la Fiscalía.

Miño trabaja en la Contraloría desde hace 24 años. Fue designado por Pablo Celi como sectario general de la Contraloría, director de Normativas y director de Responsabilidades. Además, Celi -varias veces- lo designó como subcontralor subrogante. "Cuando subrogué la subcontraloría general en 2017 y 2018, suscribí un sinnúmero de resoluciones administrativas, civiles u órdenes de reintegro confirmando, desvaneciendo o caducando responsabilidades", relató Miño. Específicamente con la empresa Nolimit, Miño dijo que recuerda haber suscrito el desvanecimiento de cuatro glosas  luego de haber recibido "una disposición directa y verbal por parte de Pablo Celi". Además, aseguró que Celi le solicitó la suscripción de desvanecimiento de glosas a favor de otras empresas de las áreas petrolera y de telecomunicaciones. Y que si no cumplía "pendía sobre él la amenaza de remoción" de su cargo o el sumario administrativo para su destitución.