El sistema carcelario vive su quinta transición en 15 meses de crisis

En los 15 meses que lleva en el poder el Gobierno de Guillermo Lasso, el Servicio de Atención a Privados de la Libertad (SNAI) es la entidad del Ejecutivo que más cambios ha sufrido.

El SNAI, que tiene rango ministerial, está cargo de la administración del sistema penitenciario ecuatoriano.

Al frente de la entidad ha habido ya cinco directores. Primero, Lasso ratificó a Edmundo Moncayo. El expolicía había sido nombrado en junio de 2019, durante la presidencia de Lenín Moreno. Pero la masacre de 22 presos en Guayaquil y Latacunga, en julio de 2021, le costó el cargo.

Su reemplazo fue Fausto Cobo, excoronel del Ejército. Su paso por el SNAI fue fugaz. Estuvo en el cargo dos meses y Lasso lo trasladó al Centro de Inteligencia Estratégica (CIES).

En septiembre de 2021, la dirección del SNAI la asumió Bolívar Garzón, también exmilitar. Su salida se precipitó por una masacre. El 12 de noviembre de 2021, fueron asesinados 68 presos en la Penitenciaría del Litoral, en Guayaquil.

Ante la urgencia, Cobo asumió de nuevo la titularidad del SNAI como encargo temporal. Su nuevo período duró un mes. Hasta que en diciembre de 2021 fue designado Pablo Ramírez. Por primera vez un General de Policía en servicio activo asumió la dirección carcelaria.

Durante sus ocho meses de gestión, Ramírez lidió con tres masacres más: 74 presos fueron asesinados en las cárceles de Turi (Cuenca) y Santo Domingo, en abril, mayo y julio de 2022.

¿Un nuevo cambio?

El 29 de agosto de 2022, un documento policial filtrado encendió las alarmas sobre un nuevo cambio en la administración del SNAI.

Fausto Olivo, exdirector de Talento Humano de la Policía Nacional, firmó un telegrama notificando el traslado temporal de cerca de 70 oficiales. En la lista resaltan los pases de cinco generales de la cúpula policial.

Entre ellos está Pablo Ramírez, actual director del SNAI. Según las disposiciones internas de la Policía, Ramírez debe asumir la dirección de Investigación Antidrogas.

Desde la firma de ese telegrama han transcurrido siete días. Sin embargo, ese cambio todavía no se ha hecho oficial. Hasta las 18:00 del 5 de septiembre de 2022, Ramírez seguía despechando como director del SNAI.

Según funcionarios del SNAI todavía no hay claridad sobre el futuro de Ramírez y de la entidad. Si bien el oficial recibió una orden de traslado, no hay un Decreto Ejecutivo que lo libere de sus funciones al frente del sistema carcelario.

Una fuente de la cúpula policial informó a PRIMICIAS al interior de la Policía tampoco se sabe qué va a pasar, pues esto "lo están tratando a otro nivel". Es decir, desde el mando político del Estado.

PRIMICIAS también consultó a Patricio Carrillo, ministro del Interior, y a Diego Ordóñez, secretario de Seguridad Pública. Pero ninguno respondió.

Desde mayo de 2022, al interior del Gobierno se analiza incorporar al SNAI como un nuevo viceministerio del Interior. Lo que tampoco se ha concretado.

Una coyuntura complicada

El posible cambio en el SNAI coincide, otra vez, con una coyuntura difícil para el sistema penitenciario, que está en crisis desde 2019.

Luego de la masacre de julio de 2022, en Santo Domingo, hubo un poco más de un mes de aparente calma. Pero, el 2 de septiembre hubo nuevos disturbios en la Penitenciaría del Litoral.

Integrantes de Los Águilas y los Latin Kings se enfrentaron a mano armada. Más de 40 civiles visitantes y 14 agentes penitenciarios quedaron atrapados en el fuego cruzado, aunque equipos tácticos de la Policía lograron evacuarlos.

Tras ese enfrentamiento, dos internos y un agente resultaron heridos. Según el SNAI no hubo personas fallecidas.

Dos días después, la mañana del 4 de septiembre, un detenido del pabellón A4 de la Cárcel de Esmeraldas amaneció herido en su celda. El interno fue enviado al policlínico del centro, donde se confirmó su muerte.