Veganismo también en las uñas
La industria de la belleza se aferra productos libres de toxicidad y amigables con el medioambiente. El veganismo en las uñas es la nueva tendencia.
La demanda y la oferta de esmaltes para uñas apuntan a productos orgánicos de ingredientes naturales.
Archivo Mundo Diners
Autor:
Actualizada:
Compartir:
Esta nota está basada en el artículo Veganismo en las uñas, de Leisa Sánchez, publicado en la revista Mundo Diners.
La demanda y la oferta de esmaltes para uñas apuntan a productos orgánicos de ingredientes naturales. Por ejemplo, aquellos que no contienen químicos sintéticos como parabenos, ftalatos, petroquímicos y sales de aluminio.
"Los cosméticos veganos, naturales y orgánicos están ganando terreno entre un creciente número de consumidores", afirma la empresa de investigación Grand View Research. Esta compañía vaticina que el mercado global de estos productos alcanzará 26.000 millones de dólares en 2030.
Cabe mencionar que los cosméticos veganos no incluyen ingredientes ni derivados de origen animal como cera de abeja, lanolina y colágeno. Además, si cuentan con certificación 'cruelty-free', quiere decir que no ha sido testado en animales.
Uñas éticas y veganas
La primera condición no implica automáticamente que se cumpla la segunda.
"Un cosmético 100% ético debe asegurar que sea vegano y 'cruelty-free' a la vez".
Blog Ideavegana.
En cuanto al nivel de componentes nocivos, estos se miden en una escala numérica en la etiqueta 'Free': mientras mayor es el número que aparece, menor es la toxicidad del producto.
Por ejemplo, los esmaltes Good. Kind. Pure., de la marca de belleza estadounidense Sally Hansen, son "100% veganos", están hechos a base de plantas y llevan el sello de 16-Free.
Un caso similar es la fórmula de Nature Strong, de OPI que, según el fabricante, no contiene formaldehído, está catalogada de vegana y 9-Free, y la componen ingredientes vegetales y minerales como caña de azúcar, trigo y maíz.
Un poco de historia
Pintarse las uñas es una vieja práctica que, a lo largo de los siglos, ha tenido diferentes matices como símbolo de vanidad, poder y estatus social.
En ciertas culturas alcanzó ribetes artísticos.
Pero, ¿cuándo se originó esta costumbre? Suele citarse el año 3000 a. C. en China, donde se elaboraba una mezcla de goma arábiga, claras de huevo, gelatina y cera de abeja. También en India, en el año 5000 a. C, se usaba henna. Los antiguos romanos y egipcios se suman al uso de uñas de color.
A esto se suma el hecho de que las antiguas dinastías chinas prestaban gran atención a las manos femeninas. De hecho, las mujeres de la corte imperial cubrían sus dedos con vainas artísticas muy largas.
Sin embargo, el verdadero 'boom' comercial llegó en 1932 con el pintaúñas espeso y suave de la compañía Revlon.
Compartir: