¡Al fin! Acaba el encierro y los ecuatorianos suben fotos de sus aventuras

Salir. Volver al sol, a la lluvia, a cruzar arroyuelos, subir cerros, caminar por parques o, simplemente, sentir un poco de brisa en el rostro. El confinamiento ha provocado una oleada de personas que buscan escapar de las cuatro paredes de su casa.

Las redes sociales dan testimonio de cómo los cibernautas regresan poco a poco al mundo natural o a las calles de la ciudad, al parque:

Ecuador es un país privilegiado en materia de naturaleza y el confinamiento nos alejó de sus tesoros escondidos, donde antes éramos felices, como dice esta visitante del Parque Nacional Cajas.

Quito no solo es una ciudad de cemento, como lo comprueba este caminante, que decidió irse de su casa, a un poco más de una hora, hasta pisar los dominios del Rucu Pichincha al que llama "mi patio de juegos".

Y hacia el sur del país, en Loja, las caminatas a la Laguna Corazón son famosas y las redes lo saben:

Ah, pero nada mejor que bañarse fuera de casa y saltar a las aguas cristalinas de Mindo:

Sebastián Almeida es un experimentado explorador, que guía grupos de viajeros hacia lugares mágicos de Ecuador como: La Cueva de los Tayos, páramos andinos, bosques subtropicales y otros parajes recónditos. Para El Chat, desde su cuenta de Instagram, nos recuerda cuán saludable es conectar con la naturaleza:

Walt Whitman sabía que el contacto con la naturaleza es vida. Curiosamente, hojas de hierba brotan en las redes sociales, en tiempos de pandemia. Joan Manuel Serrat nos recita con su voz un canto al lujo de pasear al aire libre.