¿Quiénes eran las "gentes de placer"?
Se trataba de personas con discapacidad que formaban parte de las cortes de los reyes y cuyo fin era acompañar o entretener.
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Esta nota está basada en el artículo Gente de Placer, publicado en la revista Mundo Diners de abril.
La denominación "gentes de placer" proviene de la Corte española de los Austrias. Se aplicaba para enfermos mentales, personas con enanismo o niños con malformaciones que reyes y nobles “coleccionaban” atraídos por su ingenio, rareza o inocencia.
A este macabro fin de espectacularizar la discapacidad se sumaba uno aún más retorcido y oportunista. Estas personas eran usadas para mostrar al soberano como un ser magnánimo.
Cuando no estaban en las cortes, las personas con discapacidad tenían como uno de sus destinos terminar en los "mercados de monstruos". En esos lugares se llevaba a cabo un negocio tan horrendo como rentable.
Las ganancias eran tan suculentas que se llegaba a raptar niños sanos para, por ejemplo, encerrarlos en cajas de madera, frenar su crecimiento y producirles enanismo.
Como miembros de la familia
- Para el rey Felipe, las "gentes de placer" formaban parte de su familia. Aquí hay que considerar que el concepto de familia que se tenía era el de la antigua Roma. Es decir, que se consideraba al pater familias como el responsable de todo el núcleo familiar, incluidos los criados. Un ejemplo de esta concepción está en el cuadro 'La meninas'. En dicha obra la única miembro de la familia real es la infanta Margarita, el resto son "gentes de placer" que formaban parte de su séquito.
Espías políticos o emisarios
Debido a la permanente cercanía que mantenían con el rey, las "gentes de placer" se encargaban de asuntos oscuros o incluso de misiones de espionaje.
Por ejemplo, el enano François Montaigne fue informante clave del embajador de Carlos IX en Madrid. Montaigne alertó sobre los planes de Felipe II de invadir Francia. Lo había escuchado en una conversación privada, a la que tenía acceso por su cercanía con la corte.
Otro caso se dio en la revolución catalana de 1640. Manuelillo de Gante, un enano muy cercano a Felipe IV, fue enviado a asesinar a Pau Claris, quien proclamó la Primera República Catalana.
También en el arte
- Se cree que el primer retrato de un bufón lo hizo el francés Jean Fouquet, en 1445. Por otro lado, Diego Velázquez, es el que más bufones ha pintado en la historia. De hecho, su obra consta de 20 retratos a personas con enanismo o discapacidad. Se considera que ningún pintor barroco dedicó tanto esfuerzo a este tipo de obras.
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