¿Se puede aprender a ser mamá? El dilema de 'La hija perdida' en Netflix
Entre la libertad y el sacrificio, entre la mente propia y las pequeñas cabezas que rodean a una mujer. Netflix nos presenta la angustia, la culpa y la redención de una madre que abandona el hogar.
Olivia Colman en el papel de Leda, una madre solitaria.
Internet
Autor:
Actualizada:
Compartir:
La maternidad, esa sagrada institución, es cuestionada por la película 'La hija perdida', una historia en la que una mujer se ve al borde de sus fuerzas y de sus sueños. En la mitad de dos hijas, del abandono y del reencuentro.
Vivir la vida para uno mismo o sacrificarla por los que amamos, por los demás, ese es el dilema que nos trae esta historia basada en el tremendo libro de la novelista iltaliana Elena Ferrante: 'La hija perdida'.
La historia es parte de la tetralogía de Las Novelas Napolitanas, que cautivaron al mundo pocos años atrás empezando por 'La amiga estupenda'.
Gracias a un poderoso personaje llamado Leda, observamos cómo el ser humano, tarde o temprano, busca sobrevivir y recuperar la libertad que ha aplazado para cumplir con su deber.
"Me había ido como quien acaba de quemarse y, gritando, se arranca la piel chamuscada creyendo arrancarse aquello que le está quemando", dice Leda en el libro de Ferrante.
Con la actuación impecable de la actriz británica Olivia Colman, 'La hija perdida' ha puesto a los internautas a hablar sobre las 'madres disidentes' o las 'madres no naturales', aquellas que se cuestionan seriamente y silenciosamente su maternidad en algún punto.
Aquellas que aman a sus hijos, pero que en el fondo preferían estar solas. Aquellas que los abandonan temporalmente o los pierden para siempre y no pueden soportar el dolor y el tiempo que disfrutan de esa terrible libertad.
En esta película el papel de la madre es pormenorizado, cuestionado y, al mismo tiempo, expuesto con sinceridad y va sirviendo para que los internautas dialoguen dentro de casa: madres con hijas, hijas con madres.
La joven tiktokera Corin Zúñiga nos trae un análisis sobre la película, y vaya si la juventud tiene claros sus puntos de vista sobre la maternidad:
Con una puesta en escena sutil y un manejo de cámara que nos hace recordar el pulso narrativo del cine francés, en especial de Louis Malle, la directora Maggie Gyllenhaal debuta con altura tras las cámaras.
Gyllenhaal, quien en 2002 ofreció un papel exuberante y sugestivo en la película 'Secretaria', no solo confirma su gusto por los planos de secuencias y un ritmo meticuloso para ir presentando a sus personajes, sino que, además, no milita con clichés grupales o gremiales.
Maggie Gyllenhaal, al igual que la escritora Carson McCullers (La Balada del Café Triste), aplica la regla: hombres y mujeres comparten el mismo egoísmo y la misma codicia de libertad.
Compartir: