Estreno en cines de un heroico Ant-Man y el tenebroso osito Pooh
Dos de las películas más esperadas del año se estrenan en los cines de Ecuador, en pleno feriado de Carnaval. Se trata de 'Ant-Man and the Wasp: Quantumania' y 'Winnie the Pooh: Blood and Honey'.
Imágenes de 'Ant-Man and the Wasp: Quantumania' y 'Winnie-the-Pooh: Blood and Honey'.
Dinsey/Premiere Entertainment
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El feriado de Carnaval será una oportunidad para ver en cines dos de las películas que más expectativa han causado este año. Están de estreno en Ecuador y tienen como protagonistas a Ant-Man y a Winnie the Pooh, personajes muy queridos.
Pero las nuevas películas sobre ambos ofrecen tonos muy diferentes.
Ant-Man y el nuevo villano
La primera es 'Ant-Man and the Wasp: Quantumania', forma parte del extenso universo de Marvel. Está diseñada como plataforma de la quinta fase de películas de esa casa editora de cómics.
En esta ocasión, los superhéroes Ant-Man y Wasp entran al reino cuántico y se enfrentan a Kang, el supervillano a derribar en las próximas películas de Marvel.
Quantumania también se constituye en la historia de origen de Estatura (o Aguijón), una heroína que en los cómics forma parte de Los Jóvenes Vengadores.
Carnaval cuántico
La película es un auténtico carnaval de efectos especiales, tomas de combate y momentos de comedia. Además, ofrece las habituales escenas extra. Los más pacientes serán recompensados al final de los larguísimos créditos.
Los fans más acérrimos de Marvel también tendrán algunos premios, como ver por primera vez a M.O.D.O.K. Eso sí, quizá los matemáticos no se sientan cómodos con los conceptos cuánticos de la película.
Pooh toma el cuchillo
La segunda película de estreno es 'Winnie the Pooh: Blood and Honey'. Aquí, las expectativas no están en su valor como producto cinematográfico, sino en las licencias tomadas con respecto a los personajes creados originalmente por Alan Alexander Milne.
Como todos saben, los derechos literarios del osito Pooh son de dominio público desde 2023. Cualquiera puede usar a Pooh, a Tigger, a Piglet e Igor.
Así, el director Rhys Frake-Waterfield tuvo la idea de imaginar a los habitantes del Bosque de los 100 Acres como mutantes asesinos, lejos de la ternura y hasta de la psicodelia de los libros de Milne o de las películas de Disney.
Tráiler de impacto
La película se promocionó en las redes sociales gracias al gran impacto del tráiler. Desde ahí, quedaba claro que al Pooh lo convertirían en un monstruo y eso despertó el morbo.
En todo caso, la verdadera monstruosidad está en que la película tiene carencias en su edición, su iluminación y otros aspectos. Ni un día completo oyendo las quejas de Igor se compara a este horror.
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