Troncoso: el BIESS y la seguridad social están operando al límite
Vinicio Troncoso es gerente general del BIESS desde el 15 de agosto de 2019.
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La seguridad social no piensa aceptar la propuesta de las empresas de diferir los aportes patronales para aliviar la carga del sector productivo en la crisis, más bien apela a los empresarios para que paguen y se evite un colapso del sistema de salud y de las pensiones jubilares.
La seguridad social no está recibiendo el aporte estatal de 40% para las pensiones jubilares, que ha sido suspendido temporalmente por la crisis.
"El problema en el país, el problema de todos nosotros, es la falta de liquidez, desde la persona que vive del diario, hasta las empresas, el Estado y el sistema de seguridad social. Tenemos que ajustarnos para sobrevivir el tiempo que dure la crisis", dice Troncoso.
La institución que comanda, el BIESS, está en favor de una renegociación de la deuda interna con el Estado, reconoce que tiene una morosidad alta en su cartera de crédito hipotecario y ya ve en cifras el primer impacto del crecimiento del desempleo.
¿Cómo se encuentra en esta momento el BIESS en materia de activos y de inversiones?
La seguridad social tiene hoy USD 20.000 millones en activos, de los cuales el 41% está colocado en distintos tipos de instrumentos de inversión (papeles) del Estado ecuatoriano.
Son 57 diferentes tipos de papeles del Estado, muchos de los cuales no son transables, es decir, que no se pueden vender ni colocar como garantía para acceder a créditos.
El otro 42% más o menos está invertido en crédito hipotecario. Más de 225.000 afiliados tienen créditos de este tipo con el BIESS.
Un 10% está invertido en préstamos quirografarios y un 5,5% está invertido en el sector privado en los negocios fiduciarios que se hicieron en 2013, que son 48.
La diferencia, a grandes rasgos, está invertida en papeles y obligaciones comerciales del sector productivo.
Esto es lo invertido. Por fuera de ese balance la porción que queda es la liquidez que tenemos, que son alrededor de USD 730 millones.
¿Ahora que el Gobierno habla de acuerdos entre las partes, está dispuesta la seguridad social a diferir el pago de los aportes patronales de las empresas?
Nos están solicitando masivamente que difiramos los aportes patronales, que en los próximos tres meses no cobremos las cuotas de los créditos de todos los afiliados de la seguridad social, el problema es que esto, que suma aproximadamente USD 345 millones mensuales, representa los ingresos corrientes de la seguridad social.
Y esos ingresos corrientes sirven para pagar los egresos corrientes, que son el costo de la salud y de las pensiones, lo que suma unos USD 430 millones mensuales.
En resumen, hay ingresos por USD 345 millones y egresos de USD 430 millones cada mes, tenemos un déficit de liquidez. Cómo solventar ese déficit si, en este momento, el Estado no puede aportar el 40% de las pensiones.
El Estado se encontró en esta crisis sin reservas, sin ahorros.
¿Qué hacen con el déficit?
Nosotros tenemos que cubrir el déficit con nuestras reservas del sistema de liquidez, que son USD 100 millones al mes, porque sino caeríamos en el enorme riesgo de no poder cumplir con los afiliados y con los jubilados.
No pagar las pensiones de más de 500.000 jubilados nos precipitaría en una crisis social muy importante.
Vinicio Troncoso, gerente general del BIESS
Por eso no podemos suspender temporalmente los cobros del aporte patronal ni diferir las cuotas de los créditos de los afiliados, nos quedamos sin esa liquidez que es absolutamente necesaria para hacer frente a dos o tres meses de crisis. Después ya veremos medidas de reactivación, que son posibles.
¿Cuánto peso tienen los aportes patronales en los ingresos corrientes de la seguridad social y cuánto pesan los pagos de los créditos?
Aproximadamente USD 145 millones corresponden a los aportes patronales de las empresas y USD 200 millones provienen de pagos de créditos.
Pero ojo que estos eran los números promedio de antes de la crisis, ahora estamos midiendo cuáles serán los ingresos reales, porque con la crisis estamos viendo que hay empresas y afiliados que no están logrando pagar sus aportes.
Algunas empresas se han quedado sin ventas y han cerrado operaciones y muchas personas se han quedado sin empleo en el caso de los afiliados.
Vinicio Troncoso
Si le aceptamos la moratoria a todos, perdemos los ingresos corrientes. Supongamos que lo hacemos por tres meses, estamos hablando de casi USD 1.000 millones. ¿De dónde obtenemos ese dinero que se deje de recaudar?
O sea, usted dice que están operando al límite.
Estamos operando con déficit hoy por hoy, con un margen de liquidez muy reducido y con esa liquidez que nos queda pagamos a los jubilados puntualmente todos los días 20, les depositamos en sus cuentas USD 330 millones, y pagamos el costo de la atención en salud para los afiliados.
Tenemos activos, pero si en este momento quisiéramos salir a venderlos nadie nos los va a querer comprar, apenas en agosto o septiembre o en octubre el mercado se va a reactivar y se podrán negociar algunos papeles, como los Bonos del Estado, que tiene el BIESS en su portafolio y con eso podríamos ofrecer mejores condiciones.
Pero hoy tenemos que defender lo poco que hay porque debemos pagar nuestros compromisos. Ya provisionamos para pagar el 20 de abril, tenemos que pagar el 20 de mayo, el 20 de junio y cada una de esas fechas significa un egreso de USD 330 millones.
¿El Gobierno empieza a hablar de una renegociación de la deuda interna, el BIESS es sino el mayor acreedor doméstico uno de los más grandes, cómo recibirían un anuncio en ese sentido?
Nosotros venimos motivando esa renegociación con el Estado desde diciembre de 2019. La seguridad social es el mayor tenedor de papeles de la deuda interna, tenemos más o menos USD 7.800 millones que están repartidos en 57 instrumentos diferentes y, como decían antes, no todos son negociables o transables.
Independientemente de la crisis, siempre hemos visto con buenos ojos una renegociación que incluya plazos y tasas. Estamos ya llegando a un acuerdo para reemplazar los documentos no transables por bonos que puedan ser negociados, lo que nos permitiría acudir a los mercados financieros internacionales, poner esos papeles como garantía, y conseguir liquidez.
Esa liquidez la colocaríamos en el sistema productivo para que se generen más empleos. Esto no lo podemos hacer ahora por la calidad de esos papeles e instrumentos, que no son estandarizables y, por lo tanto, no son sujetos de garantía.
Primero tenemos que regularizar esos papeles con el Estado. Esa negociación es fundamental de cara a la reactivación de la economía y hay que cerrarla lo antes posible, esto hablando de agosto o septiembre de este año.
¿Un canje de papeles?
Estamos trabajando en la homologación de los instrumentos de la deuda interna a los instrumentos de la deuda externa o bonos Global, esto para que los bonos de deuda interna tengan las mismas características de los Global, que sean transables, que sean reconocidos no solo por los inversionistas en Ecuador sino también por los inversionistas internacionales y que sean recibidos en el mercado interno y externo.
Muchos de los papeles que tenemos ahora solo le sirven a la seguridad social a su vencimiento, no se pueden hacer líquidos antes y eso tiene que cambiar.
Vinicio Troncoso
Tenemos Certificados de Tesorería (Cetes), Bonos del Estado y otros papeles bajo diferentes denominaciones, que han sido entregados específicamente a la seguridad social y son estos últimos los que queremos canjear por Bonos del Estado, con las características de los bonos de la deuda externa.
¿Qué porcentaje de los papeles que les dio el Estado a cambio de liquidez corresponde a estos elementos extraños, no transables, que no los recibiría nadie?
Alrededor de un 70% de la deuda está en ese tipo de papeles (no estandarizables, no canjeables).
Esperamos que el canje se haga a la brevedad posible porque queremos tener esa calidad de papeles en nuestro portafolio, para tener abierta la opción de hacer alguna operación de liquidez para apoyar al sector productivo.
Luego de esta crisis vamos a tener que trabajar mucho en la reactivación del sector de la construcción por el lado de la demanda y de la oferta de proyectos e inmobiliarios, ya los constructores nos han planteado una serie de alternativas para lo cual se necesitan fondos.
Podríamos entregar los bonos en garantía a inversionistas internacionales para captar los fondos que necesitamos para hacer inversiones, por ejemplo, en el sector de la construcción.
¿Estamos hablando de traer capital de afuera a través del BIESS?
Exactamente. Esta operación no se dará en el corto plazo porque la crisis es mundial, pero un canje nos podría permitir buscar las ventanas de oportunidad a partir de agosto o septiembre.
Hay ya fondos internacionales que buscan la reactivación de los países en vías de desarrollo y la ventaja que tenemos, desde la seguridad social, es que contamos con los proyectos para inyectar esa liquidez porque lo que no quieren esos fondos es que se use el dinero en gasto corriente.
¿Cómo le está pegando la crisis a los aportes patronales a la seguridad social y a la cartera de crédito del BIESS?
En términos del aporte patronal, vemos que hay un problema importante en las microempresas y las pequeñas empresas, generalmente vinculadas con el comercio porque su actividad está parada. Este es un segmento al que estamos mirando de cerca para buscar soluciones.
Necesitamos que las medianas y las grandes empresas sigan pagando sus aportes patronales.
Vinicio Troncoso
Del lado de los afiliados con créditos, tenemos aproximadamente 25.000 afiliados, o sea, más o menos un 10% de las operaciones de crédito hipotecario que ya podrían acceder a un refinanciamiento dada su situación actual, porque sus créditos ya están en mora o porque sus titulares perdieron su empleo.
Esos pedidos de renegociación y de acuerdos de pago se pueden tramitar en línea a través del portal biess.fin.ec.
¿En qué porcentajes está la morosidad de su cartera de crédito?
La cartera quirografaria tiene un nivel de morosidad de menos del 1%, podrá subir un poco dependiendo del número de personas que pierdan su empleo y salgan del sistema de seguridad social.
La cartera hipotecaria tiene una morosidad de 10,31%, es un porcentaje importante, es un indicador más alto que el del resto del sistema financiero, pero esperamos que en los próximos meses tendrá a normalizarse.
Antes de la crisis teníamos una meta de bajar la morosidad en la cartera hipotecaria a 7% en 12 meses, pero eso lo vamos a tener que prorrogar dependiendo del número de meses que dure esto.
¿La crisis ya está reduciendo el nivel de empleo, teme la seguridad social perder afiliados?
Es un escenario que va a pasar, esperemos que el impacto sea lo menor posible. Ya estamos viendo despidos y ahí viene la sensibilidad de los empresarios.
Tenemos recién resultados de marzo en términos de recaudación patronal, veamos como terminan abril y mayo para poder medir el impacto.
¿Y qué arrojan los resultados a marzo?
Que hay aproximadamente 16.000 deserciones nuevas, lo que está muy por encima de la curva típica.
Significa que hay personas que están retirando sus fondos de cesantía, e igual cantidad de reclamos tenemos sobre el seguro de desempleo.
Pero esto solo muestra lo que ha pasado en las dos primeras semanas de la crisis sanitaria y el aislamiento, del 16 al 31 de marzo.
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