Domingo, 30 de junio de 2024

Acuerdo con el FMI: Noboa se compromete a focalizar subsidios a las gasolinas en 2024

Autor:

Evelyn Tapia

Actualizada:

3 Jun 2024 - 11:10

En el acuerdo con el FMI, el Gobierno de Daniel Noboa se compromete a focalizar los subsidios a los combustibles con compensación a "los vulnerables".

Imagen referencial de una gasolinera en Cuenca, 28 de agosto de 2023.

Autor: Evelyn Tapia

Actualizada:

3 Jun 2024 - 11:10

Imagen referencial de una gasolinera en Cuenca, 28 de agosto de 2023. - Foto: API.

En el acuerdo con el FMI, el Gobierno de Daniel Noboa se compromete a focalizar los subsidios a los combustibles con compensación a "los vulnerables".

El Gobierno de Daniel Noboa alcanzó, el 31 de mayo de 2024, un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para acceder a un préstamo por USD 4.000 millones. Los primeros USD 1.000 millones llegarán a las cuentas del Estado "de inmediato", dijo el Ministerio de Finanzas.

Se trata de un programa de Servicio Ampliado del FMI (SAF) que está previsto dure 48 meses, en el que el Gobierno se compromete a cumplir varias metas, con las que espera alcanzar cuentas públicas con menor déficit fiscal e incluso un superávit primario en el mediano plazo.

El déficit fiscal ocurre cuando los gastos del Presupuesto del Estado son superiores a los ingresos que percibe. En cambio, el superávit se refiere a cuando los ingresos son superiores a los gastos.

La promesa de eliminar subsidios

Una de esas medidas a las que se comprometió el Gobierno para acceder al préstamo del FMI es la focalización de los subsidios a los combustibles.

En la carta de intención, el Ministro de Finanzas, Juan Carlos Vega, menciona que el Estado gastó USD 3.200 millones en 2023 para subsidiar combustibles.

"La mayoría de estos subsidios benefician a muchos que no lo necesitan, alientan el consumo excesivo de combustibles fósiles, socavan la transición energética, dañan el medio ambiente y crean terreno para la corrupción y el contrabando, beneficiando las actividades mineras informales y el tráfico de drogas", dice el documento.

Y añade que, por eso, una de las prioridades de la administración de Noboa será focalizar los subsidios a los combustibles, "garantizando un mecanismo de protección social apropiado para los más vulnerables".

Aunque en la carta de intención el Gobierno no detalla qué subsidio se eliminará —el Estado subsidia el precio de 16 tipos de combustibles— el presidente Noboa ya anunció el pasado 7 de mayo, que se prevé eliminar el subsidio de las gasolinas de bajo octanaje: Extra y Ecopaís.

De los USD 3.092,6 millones que el Gobierno preveía gastar en todos los subsidios a los combustibles en 2024, el 20,4% o USD 631 millones corresponde a la subvención que reciben las gasolinas Extra y Ecopaís.

La cifra del subsidio a los combustibles de producción local no es transparente, solo se conoce que el subsidio a las gasolinas de bajo octanaje importadas fue de USD 91 millones hasta marzo de 2024. Las gasolinas importadas representan el 70% del consumo local.

¿Cuánto ahorrará el Estado?

¿Pero cuánto ahorrará el Estado con la eliminación del subsidio a estas gasolinas?

En el documento del acuerdo con el FMI, el Gobierno detalla que se espera que, con medidas como la eliminación de subsidios y el incremento de la producción petrolera, los ingresos del Estado aumenten USD 831 millones o 0,7% del PIB en 2024.

Y, hasta 2028, que es cuando se prevé que termine el programa con el FMI, el Gobierno de Noboa proyecta que, con esas medidas, los ingresos del Estado aumentarán en 1,7% del PIB; esto es, alrededor de USD 2.000 millones.

El economista Freddy García cree que el Gobierno propone eliminar el subsidio a estas gasolinas porque necesita que el ahorro se concrete de manera más rápida este mismo año.

"Mediante un decreto ejecutivo, el Gobierno podría disponer la eliminación, por ejemplo, en junio, y el ahorro ya comenzaría a partir de ese momento", dice García.

En cambio, si el Gobierno propusiera un mecanismo en el que se establezcan tarifas de subsidio por sectores o con condiciones, tomaría más tiempo que se concrete el ahorro, pues se necesitarían reglamentos y sistemas de implementación a cargo de varias entidades.

El secretario ejecutivo de la Cámara Nacional de Distribuidores de Derivados del Petróleo del Ecuador (Camddepe), Oswaldo Erazo, dice que la eliminación del subsidio de las gasolinas Extra es solo un primer paso que ayudará al Gobierno a tener un alivio fiscal.

Y añade que todavía es leve el ahorro previsto, frente a lo que se podría ahorrar si se revisa el subsidio al diésel.

Solo en 2024, el gasto en subsidiar diésel será de USD 1.500 millones, menciona, esto es, el 49% del total de los subsidios a los combustibles.

Erazo menciona que es un problema que existan carros grandes y costosos, de motores grandes, que usan diésel subsidiado. Además, cuestiona que el Estado esté obligado a vender diésel subsidiado a los conductores de transporte pesado de Colombia y Perú que cargan ese combustible en Ecuador.

La compensación es una incógnita

En el acuerdo con el FMI, el Gobierno de Noboa anuncia que llevará a cabo la focalización del gasto en subsidios, sin dejar de proteger "a los más vulnerables". Pero el documento no detalla qué tipo de compensación implementará.

El pasado 30 de mayo de 2024, el ministro de Energía, Roberto Luque, adelantó que el Gobierno tiene una lista robusta de beneficiarios que recibirán esta compensación.

"Vamos a establecer un sistema de compensación para liberar el subsidio, porque genera muchas distorsiones. Hemos hecho una base de datos bastante robusta de los afectados para trabajar en esa compensación", dijo Luque.

Sin embargo, a García le preocupa que el Gobierno parecería indicar que la compensación sería algo similar a lo que ya hizo en 2019 el entonces Presidente Lenín Moreno.

El entonces presidente Moreno, en octubre de 2019, eliminó de un plumazo el subsidio a los combustibles. Y, como compensación, dijo que incrementaría el gasto en bonos sociales a la población vulnerable, como el Bono de Desarrollo Humano.

Esa decisión despertó descontento social y un paro nacional liderado por los movimientos indígenas y transportistas.

Para García eso ocurrió porque la compensación no estuvo dirigida directamente a quienes dejaban de recibir el subsidio, sino a otro sector.

"Aprendiendo de ese error, ojalá no lo repita este Gobierno", dice García.

Erazo añade que también es importante, para evitar nuevas protestas, que el Gobierno transparente cuánto dinero ahorrará y a qué lo destinará.