Comida típica y plastificado del certificado: las 'tradiciones' de los votantes
La lluvia de las primeras horas retrasó el movimiento de las ventas alrededor de los recintos. El plastificado del certificado de votación fue lo más ofertado.
Norma Quinapallo ofrecía el servicio de plastificado del certificado de votación, a las afueras de la U.E. Sebastián de Benalcazar, en el centro norte de Quito, en las elecciones extraordinarias del 20 de agosto de 2023.
Patricia González / PRIMICIAS
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Como es tradición, el plastificado del certificado de votación es el servicio más común en los alrededores de los recintos electorales, en las elecciones extraordinarias de este domingo 20 de agosto de 2023.
Algunos comerciantes informales que ofrecen este servicio madrugaron y llegaron desde las 05:30 a los exteriores de los recintos para ubicarse en el mejor puesto. Otros llegaron desde las 07:00 para esperar a los primeros votantes.
En Quito, los precios variaban, según la zona. A las afueras de los recintos U.E. República de Bolivia y U.E. Rumipamba, en el centro norte de Quito, el plastificado estaba en USD 0,25.
Pero, en los alrededores de la U.E. Sebastián de Benalcazar, en pleno centro financiero de la ciudad y en una zona de alta plusvalía, el plastificado estaba en USD 0,50.
La lluvia de las primeras horas de la mañana retrasó el flujo de ventas. A las 09:30, Edison Zamora, quien es electricista, solo había plastificado el certificado de votación a unas 20 personas, a la salida de la U.E. República de Bolivia.
Además, en ese recinto, donde alrededor de las 09:00 votó el candidato presidencial Christian Zurita, del movimiento Construye, había menor cantidad de comerciantes, en comparación con otros sitios.
Esto debido al acordonamiento con cinta amarilla de la calle, que impedía los vendedores estar en las puertas del recinto, y también a la gran cantidad de funcionarios policiales y militares, mientras se esperaba la llegada de Zurita, quien reemplazó en la papeleta a Fernando Villavicencio, asesinado el 9 de agosto.
En los alrededores de la U.E. Sebastián de Benalcázar, sobre la calle 6 de diciembre, había al menos cinco puestos para plastificar del certificado de votación.
Aunque la mayoría de los comerciantes utilizaba una máquina de plastificado, Norma Quinapallo, quien llegó a las 5:30, plastificaba a la antigua: con reverbero y plancha. Cerca de las 10:00 ya había plastificado cerca de 200 certificados, a 0,50 cada uno.
La comida no faltó
Las ventas de alimentos también acompañan la jornada electoral, aunque con lento movimiento en las primeras horas de la mañana. De hecho, algunos vendedores llegaron esta vez un poco más tarde a los recintos, debido a la lluvia.
Los tradicionales mote con chicharrón, hornado o cevichocho eran parte de la oferta gastronómica en distintos centros. También, los sánduches de pollo.
A las puertas del recinto U.E. Rumipamba, en el centro norte de Quito, vendían sánduche de pollo, cevichocho o un vaso de mango verde rebanado, con limón y sal, a USD 1.
Edwin Colina es barbero, proveniente de la ciudad de Maracaibo, en Venezuela. Desde hace nueve meses reside en Ecuador, pero ante la falta de empleo, decidió vender sánduches de pollo en esta jornada electoral.
Con un cartel en su espalda, Colina anunciaba su producto, a las afueras de la U.E. Rumipamba. Preparó 110 sánduches, que llevaba en un cooler y ofrecía a USD 1 a los votantes que salían del recinto.
En los comercios formales cercanos a los recintos también se acercaban votantes a desayunar, pero no con la afluencia que esperaban los establecimientos.
Edwin Rodríguez, administrador del local Ceres, frente a la U.E. Sebastián de Benalcázar dijo que en un domingo regular tienen cola de personas a las puertas del local, pero este día el movimiento ha sido menor. Lo atribuyó al cierre de calles aledañas.
Hasta las 10:00, el local había logrado en ventas USD 250, cuando a esa hora por lo general ya alcanza los USD 600 en facturación.
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