DP World y Contecon se disputan el mercado portuario
Según la Cepal, Guayaquil ocupa el séptimo puesto en el ranking de puertos que más carga transporta en América Latina.
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El puerto de aguas profundas de Posorja ha sido calificado como un hito por los gremios productivos del país, porque permitirá el ingreso de buques de alto calado, que hasta ahora no pueden encallar en el muelle de Guayaquil.
El 23 de agosto, la naviera alemana Hapag Lloyd trajo a esta terminal, el buque Guayaquil Express. Se trata de una embarcación Post-Panamax de 333 metros de eslora y una manga de 48 metros.
Es el segundo barco que llega a estas instalaciones desde que iniciaron operaciones el 26 de abril pasado, según DP World, la concesionaria del puerto.
Pero DP World no está sola en el mercado portuario nacional. Su mayor competencia es Contecon, empresa privada que administra el puerto de Guayaquil desde 2007.
Ambas concesionarias compiten por captar la carga de exportaciones e importaciones que se transporta a través de la terminal guayaquileña.
En 2018, datos del Ministerio de Obras Públicas indican que el puerto de Guayaquil movilizó más de 19 millones de toneladas métricas de carga. El 43% lo movió Contecon y lo restante corresponde a cuatro terminales privadas que operan en la ciudad.
Para el profesor Jorge Vera, de la ESPAE (Escuela de Negocios de la ESPOL), es muy importante que haya competencia entre los puertos del país. "Eso hará que los administradores se esfuercen por mejorar la calidad y eficiencia de sus servicios".
Vera aclara que la idea no es que se repartan el mercado que ya existe. "Deben salir a competir con otros puertos en la región y lograr posicionarse como terminales que puedan recibir buques de gran calado".
Un desarrollo portuario con inversiones privadas
Para ganar esta pelea de puertos, José Antonio Contreras, gerente de Contecon, asegura que la empresa ha invertido USD 360 millones.
Dice que el monto total aún no se recupera y que ha sido destinado a mejorar el muelle y operaciones de la terminal.
Por el puerto de Guayaquil, ubicado al sur de la ciudad, pasa hasta el 80% de toda la carga nacional.
Pero a Contreras le preocupa la sobreoferta de puertos. Además de Guayaquil, hay puertos en Manta, Bolívar y Esmeraldas.
"No va a existir un incremento de carga en el mediano plazo, lo que significa que afectará la rentabilidad de las concesionarias y los ingresos que se pagan al Estado", indica Contreras.
Como los puertos han sido concesionados pagan un aporte sobre el volumen de carga transportada. Contecon cancela el 13,5% de sus ingresos al Estado, además de impuestos a la renta y otras contribuciones.
De su lado DP World solo pagará 1% de sus ingresos y no realizará el pago del IR durante 10 años, según estipula el contrato.
La terminal en Posorja fue concesionada a la empresa dubatí DP World por 50 años y en ese lapso la firma tiene previsto invertir USD 1.200 millones.
Esta concesión directa a DP World no ha estado exenta de críticas. Incluso la Fiscalía indicó en marzo de este año que indaga un supuesto tráfico de influencias en el contrato, adjudicado en el gobierno de Rafael Correa.
La empresa desmiente los cuestionamientos y afirma que el proyecto no solo generará 500 plazas de empleo, sino que pondrá a Ecuador a competir con otros puertos internacionales como el de Callao en Perú.
Hinterland, un concepto clave
Uno de los puntos fuertes del puerto de Guayaquil, explica la Cámara Marítima del Ecuador (Camae) es que posee un poderoso "hinterland".
El hinterland es un término alemán para referirse a todos los centros y mercados de producción cercanos al puerto.
Esto ocurre en Guayaquil, cuyo hinterland está conformado por zonas comerciales, productivas y agrícolas en la ciudad y otros cantones. También hay vías de primer orden para movilizar los contenedores.
Como contraparte, Posorja, parroquia rural de Guayaquil y ubicada cerca de El Morro, aún carece de la infraestructura vial y productiva necesaria.
Vera, docente de la ESPAE, considera que la falta de servicios en Posorja sí afectará. "Es un puerto que recién empieza sus actividades y poco a poco irá incrementando la llegada de buques".
Cuando más barcos lleguen, dice Vera, Posorja no tendrá las facilidades para sacar la carga y deberá hacer nuevas inversiones.
Una ventaja que sí tiene Posorja es que permite la entrada de buques de alto calado, de hasta 9.75 metros debido a su ubicación geográfica.
Para suplir este aspecto, el Municipio de Guayaquil, con apoyo de Contecon, ejecuta el dragado del canal de acceso al puerto con lo cual se espera aumentar el nivel de profundidad hasta 11 metros.
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