Entre inversionistas gana fuerza la idea de que Ecuador es ingobernable
El riesgo país crece debido a la creciente incertidumbre política y los recientes reveses de Lasso en la Corte Constitucional, según bancos de inversión.
Torre de perforación en la plataforma A de Ishpingo. 22 de junio de 2023.
Mónica Orozco / PRIMICIAS
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La percepción de riesgo del mundo hacia Ecuador tocó el 2 de agosto de 2023 su punto récord en 36 meses y si el escenario de incertidumbre política e ingobernabilidad continúan todo apunta a que seguirá al alza.
El riesgo país de Ecuador se ubicó en 2.018 puntos el 2 de agosto de 2023, una cifra que lo colocó en el segundo país con el indicador más alto de América Latina, incluso superando a Argentina.
Mientras más alto el riesgo país, mayores son las probabilidades que miran los inversionistas de que un país caiga en cesación de pagos de sus obligaciones con acreedores.
En ese incremento hay factores internos y externos. Por un lado, crece la preocupación entre los tenedores de bonos de que Ecuador es un país ingobernable.
Lo dice Siobhan Morden, directora gerente de Santander Investment Securities, que es parte del banco español Santander.
Ingobernabilidad
El Presidente Guillermo Lasso solo ha logrado el aval de la Corte Constitucional para una de sus tres propuestas de reformas económicas en la Corte Constitucional, lo que abona en más dudas sobre la gobernabilidad del país, añade Ramiro Crespo, presidente de la casa de valores Analytica.
La obstrucción de la disuelta Asamblea Nacional ahora se extiende al poder judicial, con una Corte Constitucional que "bloquea la inversión y socavan el potencial de crecimiento económico", coincide Siobhan Morden .
La Corte dio un dictamen favorable para una reforma económica que bajaba el Impuesto a la Renta a pagar de personas naturales, pero rechazó la ley de zonas francas, una propuesta para reestructurar deudas de créditos educativos y la ley de quiebras. Incluso, sugirió renegociar seis artículos del acuerdo de comercio suscrito entre Ecuador y Costa Rica.
"Nuestra visión de mediano plazo sigue siendo bastante pesimista sobre la débil gobernabilidad de los estamentos político y judicial, que se niegan a reconocer o solucionar los problemas económicos estructurales", dice Siobhan Morden.
Y no solo eso. Crespo añade que el Gobierno había anunciado el envío de un decreto ley urgente para enfrentar las consecuencias económicas de una eventual llegada del Fenómeno de El Niño a Ecuador, cuyas pérdidas se calculan ya en USD 3.000 millones y USD 4.000 millones.
Si la Corte Constitucional no aprueba ese decreto ley, Ecuador no tendrá herramientas para enfrentar ese fenómeno climático, que se ve como una segunda amenaza para la economía ecuatoriana.
¿Una vuelta del correísmo?
Para complicar el escenario, Ecuador atraviesa por un contexto político de incertidumbre, dice Crespo.
El mercado percibe una inminente victoria del correísmo en la primera vuelta de las elecciones presidenciales anticipadas del 20 de agosto, dice Crespo.
Y añade que el mercado internacional aún recuerda políticas estatistas del correísmo, como la cesación de pagos de la deuda externa, la renegociación de contratos del sector petrolero y la expulsión de petroleras.
Pero, además, hay incertidumbre política porque aún no se conoce cómo estará conformada la nueva Asamblea Nacional.
La heterodoxia del correísmo es quizás el riesgo político más importante que miran los bonistas, dice orden.
Pero también existe el riesgo político de que empeore la gobernabilidad bajo una transición política moderada, sobre todo tras los últimos reveses que ha sufrido el Presidente Guillermo Lasso en la Corte Constitucional.
El riesgo del cierre del ITT
Un tercer factor es la consulta popular que plantea dejar el petróleo del bloque petrolero ITT, en tierra. Si gana el Sí, Ecuador dejará de extraer 55.000 barriles diarios, lo que representan USD 1.200 millones anuales de renta petrolera para el Estado.
Lo anterior complica aún más las finanzas públicas, dice José Orellana, socio de la firma ecuatoriana de estrategia y finanzas corporativas Ahead Partners y exasesor McKinsey.
Para los bonistas, la trampa del bajo crecimiento en 2%, el déficit o hueco fiscal estructural en 3%-4% del PIB y las escasas alternativas de financiamiento se traducen en una débil capacidad de pago de la deuda, según el Banco Santander.
Esto no afecta los bajos pagos de bonos soberanos de Ecuador a corto plazo, pero sigue descontando en gran medida el precio de los bonos a mediano plazo.
¿Y el escenario externo?
El principal elemento externo es la reducción de la calificación de la deuda externa de Estados Unidos, lo que ha producido un efecto de contagio en todos los mercados, en especial los emergentes como Ecuador.
Cuando existe una mayor percepción de riesgo, en este caso de Estados Unidos, los inversionistas buscan otros activos como mecanismo de protección, como pueden ser el oro.
En el caso de países con escenarios de ingobernabilidad, como Ecuador, este tipo de efectos suele tener más incidencia, explica Alejandro Arreaza, economista para la región andina del banco británico Barclays.
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