Grupos peruano y ecuatoriano invertirán USD 350 millones en los próximos 10 años para montar 32 colegios
El grupo peruano Intercorp y Adelca se asociaron. Abrirán las puertas de los primeros dos colegios en Quito, en septiembre, con una inversión de alrededor de USD 6 millones cada uno.
Imagen de uno de los colegios de Innova Schools en Quito, en 2024.
Cortesía Innova School
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El periodo escolar de la Sierra, que se iniciará en septiembre de 2024, tendrá como novedad la apertura de dos nuevos colegios en Quito. Específicamente, estarán en las parroquias de Quitumbe y Calderón.
Los colegios son parte de una inversión total que realizará el grupo peruano Intercorp prevista de USD 350 millones para los próximos 10 años. El objetivo es desarrollar 32 colegios en todo el país.
De ese monto, el 60 % lo pone el grupo peruano Intercorp y el 40 % Adelca, que es su socio local.
Bajo el nombre Innova Schools, estos establecimientos serán los primeros en inaugurarse como parte de un plan de expansión del grupo peruano.
Actualmente, los establecimientos ya operan en Perú, Colombia y México, con un total de 77 colegios y 70.000 estudiantes.
Se trata de una red de colegios que nació hace 14 años en Perú, que es parte de una vertical educativa del grupo.
En esta línea de educación cuenta, además de los colegios, con universidades, institutos y escuelas de negocios, en los que estudian 400.000 alumnos.
Intercorp ya no es un desconocido para Ecuador. Actualmente, mantiene inversiones en Quifatex y abrió la tienda ferretera Promart, en Mucho Lote, Guayaquil, a finales de 2023.
Y en 2024 está previsto que inauguren otro Promart en la avenida Granados, en el norte de Quito.
Además de esas líneas, Intercop mantiene negocios en banca, seguros, retail, farmacias, clínicas y más.
Colegios a granel
Solo en infraestructura física, la inversión de cada uno de los dos colegios suma USD 6 millones. Abrirán con una plantilla de 1.430 alumnos y 104 profesores, en inicial y primaria.
En el 2025 se ampliará la oferta a los tres primeros cursos de secundaria y en el 2026 al bachillerato. Se requerirán 1.500 docentes para la próxima década.
Adicionalmente, está ya en camino la edificación de los próximos dos colegios en la Capital, que estarán listos para el próximo año, en el valle de Los Chillos y Pomasqui.
La pensión es de USD 200 mensuales por alumno, Y la matrícula es el 70% de la pensión.
Y a los inversionistas no se les ha escapado nada. Además del modelo educativo diferente que proponen, se ha trabajado en detalles como que las actividades extracurriculares, por ejemplo fútbol, esté a cargo de Liga Deportiva Universitaria.
La inversión de los dos grupos también ha significado trabajo para otras empresas de Ecuador. Por ejemplo, los uniformes de cinco piezas han sido diseñados y elaborados en conjunto con la marca Pinto.
Entre las curiosidades de los nuevos colegios figuran puertas de los establecimientos que se abren solo bajo reconocimiento facial de los padres de familia o de las personas autorizadas.
O que buses que transportan a los estudiantes que están georeferenciados para que las familias sepan exactamente dónde están sus hijos y el recorrido que hacen las unidades.
Propuesta educativa
“Convertir a Latinoamérica en el mejor lugar para tener una familia”. Esa es la brújula bajo la cual caminan los inversionistas de esta red de colegios regional. Su CEO en Ecuador, Daniel Bucheli, explica por qué y cómo la propuesta educativa se sale del molde.
Para diseñar el modelo educativo de Innova Schools se llamó a los consultores norteamericanos de Design Thinking IDEO. Ellos, al ver las diferencias en el acceso a la educación, crearon un modelo sostenible, escalable, pero también accesible para las familias de menores recursos. Se basa en el socioconstructivismo, el cual, según Innova Schools, los conocimientos previos están hechos por y para los humanos, de modo que sitúa al estudiante en el centro del paradigma educativo y concede valor a las interacciones sociales.
“El modelo tradicional se basa en una clase donde el profesor se para delante de los alumnos y transmite el aprendizaje, toma una lección y después un examen con el que se aprueba o reprueba. El socioconstructivismo se basa en hacer y aprender. Es decir, es el aprendizaje con base en experiencias previas. Entonces, hay que construir una malla donde el estudiante está en el centro y el profesor promueve el aprendizaje a través del socioconstructivismo”.
Para lograrlo, Bucheli explica que hay un enfoque muy importante en el aspecto socioemocional, a través de la generación de proyectos. “Es decir, aprender, haciendo”.
Por otro lado, la infraestructura es estratégicamente diseñada. “El efecto de esta se traduce en un mejor aprendizaje. Todo esto es una receta maravillosa. Tenemos ya a escala regional 13.000 graduados, niños de clase media que ahora están estudiando en Berkeley, Harvard, Stanford. Y eso solo se logra a través de una plataforma educativa como la nuestra, que empuja ese aprendizaje continuo, no la memorización”.
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