Auge de precios del cacao, ¿una nueva época dorada para este producto símbolo de Ecuador?
A diferencia del boom cacaotero de los años 20, el actual auge es producto de los exorbitantes precios, que beneficia principalmente a productores pequeños.
Productor cacaotero.
Anecacao
Autor:
Actualizada:
Compartir:
El nuevo auge cacaotero de Ecuador se explica básicamente por los exorbitantes precios de la llamada "pepa de oro" en el mercado internacional.
¿Pero qué tanto se acerca al boom cacaotero que vivió Ecuador en los años 20? Ciertamente, el actual auge cacaotero tiene marcadas diferencias.
El precio de la tonelada del grano en el mercado internacional tocó los USD 10.000 en la última semana de marzo de 2024, casi el doble de lo que costaba a inicios de año.
Y, de seguir así, el cacao podría convertirse en el tercer producto no petrolero de mayor exportación para Ecuador en 2024, superando al atún y solo por detrás del camarón y el banano.
Aun así, la directora ejecutiva de la Asociación Nacional de Exportadores de Cacao del Ecuador (Anecacao), Merlyn Casanova, considera que no se puede hablar de un nuevo boom cacaotero.
Y es que un boom se configura no solo de un escenario de precios altos, sino de un crecimiento exponencial de la producción, como sí ocurrió en los años 20 en Ecuador.
"Esto no es un boom en la producción porque el crecimiento de la producción de cacao año a año ha estado en un promedio del 5% anual", añade Casanova.
Además, aunque el actual auge cacaotero beneficia a los productores, Casanova dice que el actual escenario de precios genera preocupaciones y dudas en la cadena de suministro del cacao ecuatoriano y a los industriales.
"Este aumento del precio ha afectado a los exportadores ecuatorianos que dependen del flujo financiero, pues ahora necesitan el doble de inversión para acceder a esa misma tonelada que tan solo hace tres meses estaba por los USD 4.500", dice Casanova.
Un boom de producción en los años 20
El actual escenario dista de lo ocurrido en los años 20 en Ecuador, cuando no solo hubo un aumento de precios, sino que se dio un incremento importante de producción.
De hecho, en 1916, la producción de cacao superó el millón de quintales, cuando 16 años antes había apenas logrado los 411.349 quintales.
Con ello, las exportaciones de cacao llegaron a pesar casi el 80% del total de las exportaciones ecuatorianas en esos años.
El cacao transformó la economía ecuatoriana de finales del siglo XVIII e inicios del siglo XIX. De hecho, a ese auge cacaotero el país le debe obras emblemáticas como la terminación del ferrocarril de Quito y Guayaquil y el inicio del ferrocarril a Ibarra.
Ambas obras se hicieron gracias al impuesto a la exportación del cacao, que en 1899 era de 6,33 sucres, la moneda que circuló en Ecuador antes de la dolarización.
La opulencia
Fue la época de los Gran Cacao, llamados así por la enorme riqueza que poseían al ser dueños de enormes extensiones de cultivos de cacao. Los Gran Cacao fueron los primeros en viajar a ciudades europeas como Londres, París o Hamburgo.
En el documental Historia del Cacao Ecuatoriano, cuya autora y directora es Ana Lema Araya, se cuenta que hubo hacendados que llegaron a tener hasta 1,5 millones de árboles de cacao en sus tierras, en especial en Guayas, Los Ríos, Manabí y El Oro.
La calidad del cacao ecuatoriano gozaba en esa época de gran reputación y aceptación en Hamburgo y Londres, como la marca de cacao Seminario de la familia del mismo nombre, con presencia en Los Ríos, según relata el documental.
Los granos se diferenciaba de los de otros países y se podía encontrar en cinco calidades, siendo uno de los principales el llamado "cacao río arriba", de los afluentes superiores al río Guayas.
Lema Araya describe, en su documental, que ese cacao provenía de árboles resistentes, con especímenes de 100 años, racimos grandes, con los que bastaba seis a siete mazorcas para tener una libra, de fino aroma y perfume.
Producto del creciente poderío económico de los terratenientes de la Costa, especialmente los cacaoteros, nacieron ocho bancos. El más importante fue el poderoso Banco Comercial y Agrícola, al que se atribuye haber financiado parte del desarrollo de Ecuador.
El inicio de la crisis
Pero era un auge económico "frágil", relata José Samaniego Ponce, en el libro Ensayos de Historia Económica de Ecuador por los 75 años del Banco Central.
Samaniego explica que la economía ecuatoriana no estaba diversificada y dependía de las ventas de cacao, que tuvo el inicio de su crisis en 1921.
"En 1917 se propaga entre las haciendas cacaoteras la "monilla", plaga que asola las plantaciones y desde 1921 una nueva plaga la "escoba de bruja", mucho más devastadora que la "monilla" significará la ruina de las exportaciones", apunta Samaniego citando al historiador Fernando Velasco.
A eso se sumaron otros factores como el aparecimiento de nuevos países exportadores de cacao.
De hecho, ya en 1899, Inglaterra, Alemania y otros países europeos alentaron la siembra de cacao en sus colonias africanas. Esta nueva producción terminó por hundir los precios, que sumado a las enfermedades en las plantaciones terminó por arruinar a los hacendados.
Tras la crisis, las haciendas fueron rematadas por los bancos y otras simplemente fueron abandonadas.
Con la reforma agraria, en 1964 muchos , Lema Araya describe, en el documental, medianos y pequeños trabajadores que se asentaron en haciendas abandonas o embargadas, comenzaron a legalizar sus tierras.
Paralelamente, iniciaron investigaciones privadas y gubernamentales de nuevas variedades resistentes a plagas, así como para desarrollar y tecnificar los cultivos.
Nuevo auge beneficia a pequeños productores
Eso explica que el sector cacaotero ecuatoriano actualmente se observe una gran participación de pequeños productores y sus familias en la producción de cacao.
Esto contrasta con las épocas anteriores donde la producción estaba dominada por grandes plantaciones y pocas familias, explica Anecacao.
De acuerdo con estimaciones del gremio, la cantidad de productores de cacao hace cinco años ascendían a 129.000 productores. Al día de hoy, son 138.000. De los cuales el 70% corresponde a pequeños productores, 20% medianos y 10% grandes.
Esa composición ha llevado al sector, según Anecacao, a enfocarse en mejorar la calidad del cacao y generar prácticas sostenibles (ambiental, social y económico) en los productores.
Entre los factores que han impulsado a mirar al cacao como una fuente de ingresos y actividad económica se encuentran, según Anecacao:
- Aumento de la demanda mundial de cacao.
- El reconocimiento de la calidad del cacao ecuatoriano a nivel internacional, lo que ha llevado a mejores precios y oportunidades de exportación
- Aumento del precio del cacao a nivel internacional, el cual ha permitido que generar mayores ingresos a las familias y a la cadena del cacao.
- Desarrollo de nuevos clones altamente productivos.
- Oportunidades para desarrollar y comercializar productos semielaborados y elaborados del cacao.
- Oportunidades de crecimiento en mercados internacionales y en segmentos nicho.
- El impulso de programas de apoyo gubernamental, privados y de la cooperación internacional que promueven el desarrollo del sector cacaotero, proporcionando capacitación y asistencia técnica que contribuyan a la sostenibilidad de la cadena.
- La creación de asociaciones y cooperativas entre productores el cual les ha permitido organizarse de mejor manera, acceder a mejores precios y programas de certificación como el comercio justo y orgánico.
Compartir: