Titi Bayas regresa a la música con un pop que emociona
La cantautora Titi Bayas adelanta lo que será su primer disco solista, con el que deja en claro que es una de las intérpretes que hay que seguirle la pista.
PRIMICIAS
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Se trata de retomar el camino que se había dejado de lado por un tiempo, cualquiera que sea la razón para eso. Así sean razones válidas, que siempre existen.
Pero en algún momento hay que recuperar el sendero.
Y para María Cristina Bayas este es el momento de regresar a la música.
De entrar con todo, de trabajar estas canciones que están compuestas desde hace años, y de registrarlas bajo su propio nombre, de la forma en que la han conocido desde niña: Titi Bayas.
Una labor que tiene que ver con la mujer dedicada a la música que fue en Argentina, país en el que vivió casi una década y en el que empezó a desarrollar su carrera. Por un tiempo, esta se detuvo, pero ya no más.
Y ese regreso viene de la mano con un grupo de canciones que ya están casi listas para salir.
Canciones a las que ha tenido acceso PRIMICIAS, donde las melodías mandan, en las que hay una conciencia pop muy clara, dirigida a emocionar.
En las canciones de Titi Bayas hay un carácter nostálgico, suave, ingenuo y extremadamente limpio. Algo que se percibe en el primer sencillo que se desprende del disco que todavía no tiene nombre. Espero se hizo durante el confinamiento y ofrece un atisbo de esperanza, detrás de toda esa naturaleza pop-rock argentino que suda en cada segundo de duración.
“Suelo soñar que te abrazo y que salgo al espacio / por fin / Nos queda tanto por vivir”, canta Bayas en un momento en que la canción va a retornar a un espacio de placidez.
Han sido momentos difíciles y la música puede ofrecer, ¿por qué no?, un escape.
Que se percibe en el video de la canción, en el que ella camina, canta y toca la guitarra en plena naturaleza. Al aire libre.
Espero es el adelanto de un disco que está, en un sentido estricto, listo. Que se cocinó entre Quito y Guayaquil, a distancia por la pandemia.
El álbum de 10 temas cuenta con la producción de Antonio Vergara -encargado de casi la totalidad de los instrumentos-, desde Guayaquil, y con el trabajo de Bayas desde Quito.
Una distancia que significó establecer un punto de confianza mutua y de tomar apuntes para ir generando los acuerdos suficientes.
La búsqueda para hacer música
No es el primer disco en el que Titi Bayas trabaja.
Pero sí es el primero que va a sacar, con el que reinicia todo. Al menos eso se siente.
Su permanencia de varios años en Argentina permitió el inicio de una carrera, con varias presentaciones en vivo y canciones que llegaron a grabarse, pero que se quedaron ahí.
Uno de esos proyectos de grabación lo hizo junto a su hermana, la también cantante Ale Bayas. Quien ha grabado algunas de sus canciones, como La carretera, que está en el disco Despertar, de 2019.
Pero en 2007, una producción entre ambas-en la que colaboraron músicos como Gonzalo Aloras, Claudio Cardone y Fernando Samalea- parecía probar la conexión entre Bayas y Argentina, ya sea como espacio vital o como terreno de creación.
Y si bien ese disco no pudo ver luz al final -lo que no significa que no se lo pueda recuperar, como parece insinuar la cantautora- dejó por sentado algo muy fuerte sobre cómo esa música del sur del continente se filtra en lo que ella hace.
Como se percibe en su tema Espero.
Esa influencia sigue ahí.
Incluso el gran Fernando Samalea -baterista y bandoneonista, que formó parte de proyectos con gigantes como Charly García y Gustavo Cerati- grabó baterías para tres de sus nuevos temas el pasado 4 de noviembre, en Argentina.
Así, se crea y aparece un pop que se sostiene en su melodía y en una noción de que todo tema debe llevar a algún lugar, a alguna sensación.
Espero funciona como punto de partida, tarjeta de presentación de algo que va a llegar y que debería quedarse con quien lo escuche. Quizás sea solo cuestión tiempo, de presionar "play" y ya. A veces, con el pop eso basta.
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El dúo formado por Sabi Gallegos-Anda y Aldo Vanoni entrega en este 2020 un EP (extended play) de cuatro temas en el que desarrollan con mucha precisión lo que ellos han definido como "ñengótico". Este estilo que tiene de post-punk, electropop, dark wave y ritmos latinos y que funciona en la medida en que se cumplen dos cosas: las canciones son increíbles -que lo son- y la voz de Sabi Gallegos que, entre una aparente dulzura y determinación, da el tono perfecto para que todo se pueda escuchar una y otra vez. Quizás cuatro canciones sea poco, pero los 13 minutos que dura el EP son suficientes para sentir el embrujo. Para regresar al primer tema y repetir. Mucha atención a Plumas, que cantan con Mateo Kingman.
"Astro / Reescrituras", de Mateo Kingman
Hay una larga tradición en la música independiente de Ecuador en la que los remixes, o las relecturas, se convierten en base de buena música. Este es el caso de este nuevo EP de Mateo Kingman, en el que se revisan algunos temas de su disco de 2019, Astros, y se les da otra vida, otra vestimenta, otra existencia posible. Es un ejercicio que además permite reconocer cuánto de lo personal en la música de Kingman se puede reproducir cuando otros artistas toman los temas y los convierten en otra cosa. Aquí, el trabajo de Chancha Vía Circuito, DJ Raff , de Javier Casalla de Bajofondo, DJ Raff y Miel es exquisito, sin duda.
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