Gustavo Dudamel llega a la Ópera de París para transformarla
El reconocido director, nacido en Venezuela, mantendrá sus otros compromisos mientras se encargue de la Ópera de París.
Gustavo Dudamel, dirigiendo a la Filarmónica de Los Ángeles, en la entrega de los premios Óscar el 24 de febrero de 2019.
Reuters
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El músico venezolano Gustavo Dudamel se convirtió este 16 de abril de 2021 en el nuevo director musical de la Ópera de París para las próximas seis temporadas. Una aventura que dijo asumir con honor y ganas de aportar una visión de transformación e inclusión.
"Esta es una decisión de gran importancia para el futuro de nuestra institución. Dudamel es portador de una visión renovada y abierta de relación con la música", dijo el director general de la Ópera de París, el alemán Alexander Neef, durante el anuncio.
Dudamel (Barquisimeto, 1981) es un niño prodigio del revolucionario Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela. Este fue fundado en 1975 por quien fue su mentor, José Antonio Abreu.
Y fue en los salones del Palais Garnier, el histórico edificio de la Ópera de París, donde él aceptó públicamente el cargo.
"Cuando Alexander me llamó para ofrecerme el puesto, no dudé ni un momento en decir ¡oui!", explicó Dudamel. Él se mostró emocionado durante el acto, retransmitido también en redes.
El venezolano mantendrá su trabajo al frente de la Filarmónica de Los Ángeles y de la Sinfónica Simón Bolívar de Venezuela. Aunque no ha pisado su país desde que expresó su descontento con el régimen de Nicolas Maduro en 2017.
Crear un programa educativo
En Estados Unidos creó un proyecto inspirado del propio Sistema, el Youth Orchestra Los Angeles. Un programa formativo para jóvenes de familias sin recursos cuya experiencia también tendrá su huella en París.
"La Ópera de París tiene unos programas educativos interesantísimos, quiero ampliarlos o enriquecerlos con los programas del Sistema, que son parte fundamental de mi ADN", dijo Dudamel en declaraciones a EFE.
El venezolano cree que su aportación a la mítica institución, que celebró en 2019 sus 350 años de historia, permitirá partir de la tradición a la que está asociada para evolucionar. Y así, conectarla con los nuevos tiempos.
"Las nuevas generaciones ven quizás el arte como algo muy lejano, inaccesible, que no es interesante", lamentó Dudamel, que explicó que su objetivo precisamente será hacer que esa generación se identifique con lo que es el arte.
"Nuestra propia identidad y acceso a la belleza".
Gustavo Dudamel al hablar sobre lo que es el arte
Para París, se trata de un nombramiento rompedor. Así como una prueba de que dobla la apuesta de los últimos años de llegar a todo tipo de público y atraer a jóvenes con pocos recursos o de ambientes menos favorecidos.
En la conferencia, Dudamel, que estuvo acompañado de su esposa, la actriz española María Valverde, se mostró totalmente en sintonía con Neef. Además, explicó que ambos comparten la meta de honrar la historia de la institución mirando hacia delante.
Una visión de futuro
"Queremos trabajar con nuevos compositores, coreógrafos, directores, y que la Ópera de París sea también una plataforma para el futuro", avanzó Dudamel.
Futuro, una palabra que no dejó de repetir en sus intercambios con la prensa. Y que muestra su compromiso con las nuevas generaciones, entre las que Dudamel se afianza como un referente.
"Esto lo veo también como un logro de equipo, de todos mis compañeros con los que crecí, de todos esos jóvenes y niños que están aprendiendo y soñando. Son referencias importantes para estar motivado a crecer. Es la representación de un logro", dijo.
Hijo de un trombonista y de una profesora de canto, creció escuchando en su casa tanto salsa como música clásica. Un cóctel que ha llevado a los escenarios de medio mundo, como cuando en 2008, con 27 años, se atrevió a meter un mambo en un recital del sacrosanto Festival de Salzsburgo, donde es un habitual.
Dudamel no ha dudado en romper los códigos allá donde va, desde la Scala de Milán hasta el Teatro Real de Madrid o la Filarmónica de Viena. Allí se convirtió en 2017 en el maestro más joven en dirigir el Concierto de Año Nuevo.
Ahora solo falta que la entidad, dividida en la Ópera Garnier y Bastilla, pueda reabrir sus puertas al público. Esto tras más de un año prácticamente cerrada por las restricciones sanitarias contra la pandemia.
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