Países Bajos, rival de Ecuador en el Mundial, avanza en la Liga de Naciones

Los de Loius Van Gaal se llevaron un buen sabor de boca del último partido oficial antes de que en noviembre se dispute el Mundial de Catar, un encuentro más técnico que estético donde Países Bajos hizo los deberes y se divirtió en los minutos finales.

Bélgica, necesitada de goles y privada por lesión de Romelu Lukaku, asomó por el área neerlandesa pero no supo hacer daño pese al sólido nivel de Kevin de Bruyne y al buen rendimiento del debutante Amadou Onana, centrocampista defensivo pero con llegada nacido en Dakar hace 21 años.

Los de Roberto Martínez, sustituido en el banquillo por Thierry Henry, no encontraban verticalidad en el primer tiempo.

En la segunda parte, Henry y Martínez apelaron a la profundidad por banda de Yannick Carrasco, que entró por Thomas Meunier por la derecha. Y tras sesenta discretos minutos de juego, Eden Hazard, el capitán, cedió su lugar a Leandro Trossard.

No surtió efecto. Los belgas adelantaron las líneas, pero a costa de dejar más espacios para las contras de Países Bajos, con Denzel Dumfries llevando el peso del equipo en un partido en que Van Gaal fue repartiendo los cambios para garantizar intensidad física en todas las fases del encuentro.

Finalmente, fue Virgil van Dijk quien cerró el partido en el 71 para Países Bajos. El central del Liverpool remató de cabeza un tiro de esquina que hizo imposible la remontada de Bélgica.