Municipio y transportistas, en un 'tira y jale' por el control de la flota de buses urbanos en Guayaquil
Además de un nuevo sistema de recaudo con tarjeta, lo que rechaza el gremio de transporte urbano es la pérdida del poder sobre rutas y frecuencias. En medio de la paralización parcial del servicio, el Municipio advirtió con la no renovación del permisos de funcionamiento a 28 cooperativas.
Usuarios aguardan por un bus en la parada del Registro Civil Municipal de la Martha Roldós, en el norte de Guayaquil. El servicio aún es irregular este miércoles 11 de septiembre de 2024, en el tercer día de una paralización parcial del servicio en la ciudad.
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PRIMICIAS
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Los transportistas levantados en una paralización parcial de los buses urbanos lo han repetido entre líneas en los últimos tres días de suspensión del servicio en Guayaquil. Aceptar el nuevo modelo de recaudo que propone el Municipio significa para ellos el fin de la transportación como la conocen.
Y es que no sólo rechazan el nuevo sistema de recaudo con tarjeta que, según el gremio, alimenta las arcas de una empresa privada -el consorcio STG-. También está en juego la pérdida del poder sobre rutas y frecuencias: Es decir, sobre su propia flota.
El Consorcio STG le informó a PRIMICIAS que el recaudo del pasaje a través de la tarjeta La Guayaca -que ya se está implementando en el sistema masivo Metrovía- es solo un componente del contrato de alianza estratégica público-privada con la Municipalidad.
El segundo componente es el de la “gestión de la flota” de buses, lo que incide en un control de la calidad del servicio que se presta a los usuarios.
Este control de la flota incluye, según la empresa, el seguimiento a la operación del servicio, la información relativa a los kilómetros recorridos, horarios de inicio y fin de atención, cumplimiento de recorrido y de los intervalos de paso por diferentes sectores, entre otros.
“Este componente busca incidir de forma positiva en la calidad del servicio, así como reducir gastos operativos debido a una planificación inadecuada”, señala STG. Y pone el ejemplo de frecuencias excesivas en horas de poca demanda que saturan las calles de la ciudad.
Se trata de un problema de vieja data diagnosticado por los expertos en transporte, que incluye además falta de sectorización de las líneas de buses y recorridos sumamente extensos, que se alargan por más de tres horas y hasta por 91 kilómetros de trayecto.
Municipio advierte con no renovar permisos
De hecho, una 'gestión' indirecta sobre la flota está por empezar. El alcalde de Guayaquil, Aquiles Alvarez, advirtió en su enlace radial con no renovar los permisos de funcionamiento a frecuencias a cooperativas que están prorrogadas hasta diciembre próximo.
La Agencia de Tránsito y Movilidad (ATM) del Municipio informó que a 28 cooperativas se les termina el permiso al finalizar el año y se evaluará la renovación a cada una de ellas.
“Vamos a ser implacables, no la vamos a renovar”, dijo Alvarez en referencia a la cooperativa de la que hace parte Christian Sarmiento, el presidente de la Federación de Transportistas Urbanos de Guayas (Fetug) y quien lidera la paralización del servicio.
El contrato con STG por un monto estimado de USD 30,9 millones se firmó en mayo de 2022, en la administración municipal anterior. Y la Contraloría ha señalado una serie de irregularidades administrativas y falta de transparencia en la selección del Consorcio.
“El problema es que (los de la Fetug) no quieren evolucionar, están en la prehistoria, quieren seguir contando monedas. Estamos proponiendo evolucionar con USD 0,10 más para ellos”.
Aquiles Alvarez, alcalde de Guayaquil.
Pero, según Alvarez, la inversión de la empresa ya supera los USD 17 millones y terminar con la alianza resultaría en prejuicios legales y económicos para el Municipio de Guayaquil. “Analizando el contrato, viendo la parte positiva, por supuesto que vale la pena”, dijo.
Una semana más para definir alza
Manuel Salvatierra, gerente de la ATM, informó que el nuevo modelo tecnológico incluye nuevos sistemas de rutas y paradas para los buses y control de velocidad de las unidades.
También reconoció que se contempla una redistribución de rutas en pos de un mejor servicio. “El nuevo modelo no solo es un sistema de recaudación, es poder innovar y avanzar”, dijo.
El cronograma y las condiciones para un alza definitiva del pasaje de USD 0,30 a USD 0,45 (aprobado desde mayo) deberá esperar una semana más.
La ATM anunció que ha conseguido que 24 de 58 operadoras retomen sus recorridos e iniciará con ellas una nueva mesa técnica (la número 12) hasta el miércoles de la próxima semana, a fin de presentar un proyecto de alza al Concejo Cantonal. Y la Fetug denunció que se las excluyó de las negociaciones.
Entre los pedidos de la transportación está aplicar la instalación de aire acondicionado e Internet de forma progresiva. Y en las mesas se espera fijar un porcentaje de unidades que deberán iniciar con sistema de climatización.
El gremio también rechaza condiciones del contrato con STG, como la entrega del dinero que le corresponde a cada unidad al octavo día de prestado el servicio. Y ese será otro de los condicionamientos que se deberán “negociar” en la mesa técnica.
El Consorcio STG cobrará 6,69% de la tarifa vigente más IVA (USD 0,03 centavos), además de 2% de costos asociados a transacciones, lo que de acuerdo a los transportistas le valdrá a la empresa ingresos por USD 1,4 millones mensuales durante 20 años de contrato.
El recaudo incluye la incorporación y gestión de los puntos de recarga de la tarjeta La Guayaca y se han confirmado más de 6.000 en la ciudad. “Los operadores de buses convencionales más bien optimizarán sus ingresos, estos no disminuirán”, aseguran desde la empresa.
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