Las mujeres en Ecuador reciben en promedio USD 4.700 en créditos para emprender
A septiembre de 2024, el 52% de las operaciones de microcréditos vigentes en entidades financieras corresponden a mujeres; pero, en monto, han recibido menos que los hombres.
Hermelis Figueroa introduce una bandeja de panes en un horno industrial.
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Cortesía Hermelis Figueroa
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En Ecuador, el acceso a microcréditos para emprendimientos es casi equitativo entre hombres y mujeres, sin embargo, los hombres suelen recibir montos superiores.
De las 2,2 millones de operaciones de crédito vigentes en este segmento, a septiembre de 2024, el 52% corresponde a mujeres. Pero en monto total de esta cartera, las mujeres representan un 46%.
Lo anterior también se refleja al ver el monto promedio de microcrédito que reciben los hombres: USD 6.017, frente a las mujeres: USD 4.743, según datos analizados por la firma Aval Buró.
Las mujeres de Pichincha son las que más microcréditos reciben del sistema financiero nacional, con una cartera de USD 1.191 millones a septiembre de 2024. Le siguen Guayas (con USD 508 millones) y Tunguragua (con USD 504 millones).
En un contexto de desaceleración económica y contracción del crédito, el microcrédito no ha sido la excepción; al igual que otros segmentos, su cartera ha disminuido 1% en número de operaciones y 2% en monto, con relación a 2023.
Según la Junta de Regulación Financiera, un microcrédito es aquel que se otorga a una persona natural o jurídica con un nivel de ventas anuales inferior o igual a USD 300.000. En cuanto al monto a otorgar, cada institución financiera establece sus propios parámetros.
Enfoque de género
De acuerdo con Aval Buró, los bancos otorgan más microcréditos a las mujeres, pero las cooperativas de ahorro y crédito aprueban créditos superiores, casi el doble. Mientras en bancos, el promedio de un microcrédito es de USD 3.339, en cooperativas es de USD 6.506.
Banco Solidario es una de las entidades que ha impulsado el desarrollo económico de las mujeres a través de su programa 'Mujer Solidaria', con una oferta de productos y servicios financieros, así como módulos de educación financiera y para negocios, dirigidos a mujeres.
El 59% de los microcréditos otorgados por este banco son a mujeres, en montos, representan 58%, con un promedio de USD 3.985 por crédito, detalla Avelina Pérez, directora de Asuntos Corporativos de Banco Solidario.
Los tipos de negocios a los que más suelen destinarse estos créditos son: restaurantes o cafeterías, tiendas de abarrotes, comercios de ropa, sastrerías, peluquerías, comercios de cosméticos y bazares.
Emprendió en repostería
Hermelis Figueroa es madre soltera de dos hijos de 14 y 5 años. Y en los últimos tres años, la repostería ha sido el sostén de su familia, un negocio en el que emprendió con apoyo de la organización Ayuda en Acción y su proyecto Integra, que fomenta la inclusión económica y social de la población migrante en Ecuador.
Figueroa es venezolana y desde que llegó a Ecuador se ha establecido en la ciudad de Ibarra. Como parte de Integra, recibió formación en temas vinculados al emprendimiento, como finanzas y promoción de productos; previamente también realizó cursos de repostería y pastelería con el Servicio Ecuatoriano de Capacitación Profesional (Secap) y en la empresa pública Uemprende.
En 2022, logró acceder a un primer microcrédito en el Banco Codesarrollo, que mantiene una alianza con Ayuda en Acción. El monto del crédito fue por USD 500, que invirtió en una batidora de pedestal, un tanque de gas, moldes y materia prima. Ese crédito lo pagó a 12 cuotas.
Luego, logró una renovación del crédito por USD 1.000, dinero que empezó a pagar en mayo de 2024, en cuotas mensuales. Este segundo préstamo lo invirtió en una laminadora de masa eléctrica que le ayuda a aplanar las masas de hojaldre; esa herramienta le costó USD 860.
Hermelis elabora tortas, milhojas, dulces en pasta seca, y dice que sus productos se distinguen por ser a base de frutas naturales y no utilizar ingredientes artificiales. Los vende por encargo o en las calles de la ciudad, por porciones.
Figueroa prepara sus productos en las mañanas, luego retira a su hijo del colegio y sale a vender. Pero, actualmente, con los cortes de luz, está preparando sus productos en las horas que tiene luz, incluso de madrugada. Su sueño es abrir un pequeño local de dulces en el centro de Ibarra, para ello espera poder conseguir otro microcrédito.
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