Apagones:¿Cuánta energía tiene Ecuador y cuánto realmente necesita para salir de los cortes de luz?
Según el Viceministro de Energía, Fabián Calero, en los últimos 10 años no se instalaron 1.951 megavatios para cubrir la demanda que fue creciendo en el país.
Por los cortes de luz, ciudadanos buscan generadores en una ferretería en Samborondón, 16 de noviembre de 2024.
- Foto
PRIMICIAS.
Autor:
Actualizada:
Compartir:
Desde el 23 de septiembre de este 2024, Ecuador vive la peor crisis eléctrica de los últimos 15 años, con cortes de luz diarios que han llegado incluso hasta a 14 horas.
El Presidente Daniel Noboa ha ofrecido que los apagones terminarán en diciembre de 2024, pero no ha precisado qué día, mientras los expertos creen que Ecuador sigue siendo vulnerable de caer en nuevos racionamientos en 2025 y en el futuro.
Y es que en octubre y los primeros 15 días de noviembre de 2024, el déficit de energía que tenía el país llegó hasta los 1.800 megavatios de potencia, según especialistas como Gabriel Secaira.
Esa brecha solo se redujo desde el 17 de noviembre, cuando Colombia reanudó las exportaciones de energía a Ecuador. Desde ese día, este país ha aportado entre 400 y 440 megavatios en promedio al sistema ecuatoriano en medio de la crisis eléctrica.
Con eso, el déficit de energía hoy es de alrededor de 1.500 megavatios, una potencia similar a la que en teoría debería tener la mayor central hidroeléctrica de Ecuador, Coca Codo Sinclair.
Según el viceministro de Electricidad Fabián Calero, el problema radica en que en los últimos 10 años, se debieron implementar 1.951 megavatios al sistema, para cubrir el ritmo de crecimiento de la demanda del país, pero eso no ocurrió.
"Eso nos tiene con un déficit que hoy estamos solucionando", dijo el funcionario en un evento minero el 26 de noviembre de 2024.
El Gobierno de Noboa además ha enfatizado que la crisis se debe a la grave sequía que vive el país desde agosto de 2024.
¿Cuánta energía necesita Ecuador?
El Sistema Nacional Interconectado (SNI) del país cuenta con 7.492 megavatios instalados en 139 centrales de generación, mientras que la demanda máxima de los ecuatorianos es de alrededor de 5.000 megavatios, según el Plan Maestro de Electricidad 2023-2032 publicado en el Gobierno de Noboa.
Entonces, ¿por qué hoy el país tiene que soportar apagones que está previsto se extiendan hasta diciembre de 2024?
El experto energético Ricardo Buitrón explica que el problema está en que esa generación instalada no opera al 100% durante todo el tiempo.
En el caso de las centrales hidroeléctricas, su capacidad de generación se desploma en épocas de estiaje o sequía. Y en este 2024, ese período ha sido de los más severos de los últimos tiempos, dice Buitrón.
Otro problema es que la mayoría de la potencia hidroeléctrica está en la misma cuenca oriental, es decir, no hay diversificación o complementariedad hidrológica.
Para Ecuador, esta grave sequía de 2024 ha sido mucho perjudicial porque el 69% de esos 7.492 megavatios instalados son de centrales hidroeléctricas.
En época de lluvia, la generación de las hidroeléctricas suele representar hasta el 90% de la oferta de energía en Ecuador. Sin embargo, en lo que va de noviembre de 2024 la generación de las hidroeléctricas ha representado solo el 50% de la energía con la que necesita el país.
Aunque lo ideal sería que en época de sequía las térmicas, que operan con combustibles fósiles, compensen esa caída, eso no ha ocurrido.
El problema con las centrales térmicas radica sobre todo en que operan por debajo de su capacidad por problemas técnicos a raíz de la falta de mantenimiento, además de la antigüedad de la mayoría de estas centrales, añade Buitrón.
¿Cómo está el parque hidroeléctrico y termoeléctrico?
Según el Plan Maestro de Electricidad, hay 5.186 megavatios de potencia instalados en 71 centrales hidroeléctricas en todo el país. Pero entre el 1 y el 28 de noviembre, la generación hidroeléctrica ha sido de 1.415 megavatios, esto es apenas el 27% de esa potencia hidroeléctrica instalada.
La sequía ha sido más severa en noviembre si se compra con octubre. Y es que en octubre de 2024, la generación hidroeléctrica fue de 1.789 megavatios.
Esta situación ha llevado a que durante noviembre el mayor complejo hidroeléctrico del país: Paute-Integral, opere a apenas el 15% de su potencia instalada, que es de 1.756 megavatios.
En cambio el parque termoeléctrico instalado en Ecuador suma 2.062 megavatios en 37 centrales.
La generación térmica sí ha mejorado en algo entre octubre y noviembre, pues en octubre la generación térmica fue de 880 megavatios. Y ha subido a 982 megavatios entre el 1 y el 28 de noviembre de 2024.
Según Calero, el Gobierno ha recuperado cerca de 479 megavatios que estaban indisponibles en estas centrales térmicas en los últimos seis meses, como una estrategia para afrontar la crisis eléctrica.
¿Hasta cuándo durará la crisis eléctrica?
Para Buitrón, es clave que los Gobiernos de turno tomen decisiones técnicas para hacer frente al déficit de energía, pues el cambio climático hace pensar que habrá períodos de sequías más fuertes y largos que antes.
Y para ello, una herramienta indispensable es que el Plan Nacional de Electricidad tome en cuenta los cambios y riesgos climáticos.
"No puede ser letra muerta, el Plan Nacional no es opcional, se debe cumplir lo que se establece ahí, pero también es necesario que este documento sea técnico y realista", agrega.
Buitrón critica, por ejemplo, que el Plan no había sido actualizado desde 2018, cuando comenzaron los cortes de luz de octubre de 2023 en el gobierno de Guillermo Lasso. Y agrega que el Plan presentado por el Gobierno de Noboa no parece muy realista.
Por ejemplo, menciona que el Plan contempla una expansión o aumento de la generación de unos 7.400 megavatios en los próximos ocho años. "Eso es imposible, es como esperar que se implemente la generación que el país ha conseguido en los últimos 50 años", dice.
Otro problema es que de esos 7.400 megavatios de potencia que el plan prevé que se instalen hasta 2032, unos 5.593 megavatios corresponden a centrales que deberían ser instaladas por el sector privado. Esto en un país en el que históricamente la generación ha sido un monopolio estatal.
Entre ellas están proyectos como las hidroeléctricas Santiago y Cardenillo, o los proyectos de energía renovables como El Aromo y Villonaco, que llevan años paralizados, agrega Buitrón.
Compartir: