Witoca, café ecuatoriano de exportación, sembrado en chakras y degustado en Alemania
Alrededor de 100 familias, en su mayoría kichwas amazónicos de dos parroquias de Loreto, en Orellana, participan en este proyecto.
En la comunidad de Witoca, en Loreto, trabajan 145 familias para producir café robusto especial bajo el sistema "chakra".
- Foto
PRIMICIAS
Autor:
Actualizada:
Compartir:
Loreto es un cantón ubicado al suroeste de la provincia Francisco de Orellana, en la Amazonía ecuatoriana. En esta zona, familias de agricultores están forjando un nombre en la producción de café.
Según el Ministerio de Agricultura, Orellana se encuentra entre las cinco primeras provincias con mayor producción de café, con aproximadamente el 8% de la producción nacional. En primer lugar está Manabí con el 40%, seguida de Loja.
Hace más de cuatro años, en los límites de dos parroquias de Loreto -San Vicente de Huaticocha y San José de Dahuano-, se creó Witoca, una organización que apuesta por la agricultura sostenible a través del sistema "chakra".
La chakra es un sistema ancestral de producción sostenible, generalmente manejado por mujeres kichwa, quienes aplican saberes ancestrales y ecológicos conservando el bosque, el agua, el suelo y la vida silvestre.
Los fundadores fueron Andrea López y Fabio Legarda, hijos de agricultores de Loreto, quienes desde niños vieron cómo el trabajo de los productores no era valorado ni recompensado.
En 2018 se organizaron y, con 15 socios jurídicos (50% kichwas y 50% mestizos), empezaron a darle forma al proyecto. Actualmente trabajan con 130 socios comerciales, en su mayoría kichwas amazónicos.
Exportación desde hace dos años
Witoca, que produce café robusta especial, comenzó a exportar hace dos años. Primero fue a Alemania, donde el mercado es estable y envían al menos 100 sacos de 60 kilos cada año. También han logrado introducir su producción en Estados Unidos, Luxemburgo e Italia.
En 2023, el precio del café "honey", procesado mediante un secado y fermentación especiales, fue de USD 350 por quintal, mientras que el café procesado de manera natural se vendió a USD 475, según informó Lucía Chávez, integrante de Witoca.
El 75% de su producción se exporta, mientras que el 25% restante se destina al mercado local. También cuentan con un laboratorio de café que sirve para enseñar no solo a estudiantes, sino también a los mismos agricultores
En este proyecto se han especializado en el cultivo de café robusta especial, con el desafío de preservar su cultura y tierra, enfrentando los retos de la economía moderna y la necesidad de cuidar el medio ambiente.
“Cuando se habla de robusta especial, se refiere a un café que ha sido cultivado, cosechado y procesado con mucho cuidado, buscando destacar atributos de sabor únicos y cumplir con ciertos parámetros de calidad”.
Lucía Chávez, integrante de Witoca.
Witoca ha ganado tres premios Taza Dorada, un concurso organizado por la Asociación Nacional del Café (Anecafé).
Según Lucía Chávez, los agricultores solían entregar el producto sin participar en el proceso para comprender cómo se transforma la pulpa en café soluble.
En el laboratorio cuentan con una tostadora artesanal, hecha en forma de olla de barro, que es una manera ancestral en la que las abuelas procesaban el café.
El objetivo principal del proyecto es dinamizar la economía de los agricultores y ofrecerles un lugar seguro donde vender su producción a un precio justo.
Para David Ortega, guardaparques de la zona protegida en Loreto, el café robusto de especialidad que se cultiva allí es producto de la biodiversidad del terreno y en un ambiente equilibrado y sostenible.
El cultivo amigable
Lucía agregó que la producción no es masiva, porque los agricultores buscan producir calidad, manteniendo el sistema chakra, que promueve la agricultura natural, la regeneración de los bosques y la conservación de cultivos tradicionales como la yuca, verde, arroz y guayusa.
"Nuestra producción es en lotes finos, lo que requiere más trabajo. No es un café de producción masiva, no queremos ser monocultivos. Quizás con el tiempo otras organizaciones se animen a realizar este proceso, aunque implica mucha inversión", explicó.
Para evitar la contaminación, la organización entrega nutrientes libres de pesticidas.
"Es un camino largo para enamorarnos de la agricultura limpia. Estamos aquí desde 2018, buscando darles una vida digna a los agricultores en su propio territorio y evitar la migración forzada por falta de oportunidades en su tierra", mencionó Lucía.
Añadió que seis años es muy pronto para evaluar el impacto del trabajo realizado, pero todos los socios han aumentado sus habilidades en toda la cadena de producción, desde el campo hasta la taza.
Lucía mencionó que todo es más complicado en Ecuador debido al “papeleo” necesario, especialmente para exportar. Witoca se considera una tribu con dos personerías jurídicas, cada una con actividades diferentes: una para la exportación y otra para procesar el café en su propio laboratorio y la venta local.
Apoyo a la educación
Además de apoyar a las familias productoras en las zonas indígenas de Loreto, Witoca ha contribuido con la educación.
Con fondos no reembolsables y gestiones ante el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural, construyeron la biblioteca infantil Yuyarina Pacha, que beneficia a alrededor de 2.000 habitantes.
Esta biblioteca de dos plantas, construida con materiales de la zona, se ha convertido en un atractivo también para los turistas.
Kleber Olalla, alcalde de Loreto, aseguró que una de las fortalezas para promover el turismo es incentivar a las comunidades a mostrar las habilidades ancestrales de los pueblos milenarios de Loreto, como en Huaticocha, donde se produce uno de los mejores cafés aromáticos.
Compartir: