Luis Piedrahita, el DT ecuatoriano que llegó al Leganés de Jackson Porozo y sueña con llevar a la Tri a un Mundial
Luis Piedrahita tiene 27 años y se desempeña como analista de video del Leganés, equipo de la primera división del fútbol español. Uno de sus objetivos a largo plazo es dirigir en Ecuador y llevar a la Tricolor a las fases finales de una Copa del Mundo.
El DT ecuatoriano Luis Piedrahita dirige un entrenamiento con el Real Sporting de España.
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Cortesía Luis Piedrahita
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Luis Piedrahita sumó una nueva aventura a su extensa carrera. En noviembre pasado fichó por el Leganés por una temporada, club al cual lo califica como "ordenado y que aspira a grandes cosas".
Su arribo a España se dio a través de un contacto que maneja la comunicación del entrenador del club; así fue parte de un proceso de selección, hasta ser elegido como parte del cuerpo técnico liderado por Borja Jiménez.
Y su debut fue nada más y nada menos que frente al Real Madrid, en un partido que terminó con goleada para los 'merengues' (0-3).
Luis Piedrahita cuenta que, más allá del resultado, esta nueva oportunidad en su carrera la toma como "algo soñado", sobre todo por haberla encontrado en medio de una temporada iniciada.
Además, señala que el partido ante el Real Madrid lo tomó con normalidad, aunque no ocultó su felicidad por haberse enfrentado a "grandes ídolos".
Ahora, el entrenador se encontró con el zaguero ecuatoriano Jackson Porozo, de 24 años, quien se sumó al club en agosto de este año.
Si bien no ha tenido muchos minutos en esta temporada, Piedrahita cree que es un futbolista que puede seguir creciendo, gracias a su potencia física y su disciplina táctica.
Una carrera inobjetable
Piedrahita empezó en la dirección técnica desde muy chico, sobre todo por la influencia de su padre, exfutbolista profesional y también entrenador.
Su primera experiencia fue en Técnico Universitario; después pasó a Cobreloa de Chile, regresó al país para dirigir a Manta y nuevamente se trasladó a Santiago, para vincularse a Huachipato.
También fichó por Sport Boys de Perú y Gualaceo, hasta que en 2019 llegó a Independiente del Valle.
Su paso por el equipo de Sangolquí significó una vitrina gigantesca para su carrera. Y es que coincidió con la llegada de Miguel Ángel Ramírez, quien lo sumó a su cuerpo técnico como analista de video.
A partir de allí, su carrera fue en ascenso. Vivió experiencias inolvidables, como el título de la Copa Sudamericana 2019 tras la final única ante Colón de Santa Fe en Asunción.
Su éxito en IDV les permitió sumarse a Internacional de Porto Alegre, un grande de Brasil que en ese momento tenía a jugadores como el peruano Paolo Guerrero o el brasileño Edenilson.
"El paso por Inter fue de mucho aprendizaje. Jugamos muchos partidos en poco tiempo. Fuimos dominantes en el torneo estadual como en la Copa Libertadores. El equipo jugaba bien. Pero el futbol brasileño es inmediatista, y sobre todo en un club con esas dimensiones".
El cuerpo técnico apenas duró un semestre en Porto Alegre y su siguiente destino fue la Major League Soccer (MLS), precisamente el Charlotte FC. Allí dirigieron 10 meses antes de trasladarse a Europa, para comandar el Sporting de Gijón español.
Para Luis Piedrahita, cada equipo y las ciudades en las que vivió le dejaron lecciones únicas y experiencias inolvidables.
Y en ese sentido, sostiene que ya se acostumbró a la vida de entrenador de fútbol. "Es una incertidumbre constante. Hay que aprender a valorar la incertidumbre. Es parte de las reglas de juego".
Después de 11 meses en el Sporting de Gijón, el cuerpo técnico se vinculó a Al-Wakrah SC de Qatar, en donde también tuvo un corto paso y Piedrahita dio un paso al costado. Dejó el equipo de trabajo comandado por Ramírez.
"No me costó separarme de Miguel Ángel (Ramírez). Tengo una relación muy especial y le tengo un cariño muy grande. Estos retos me motivan a conocer nueva gente".
Su propia carrera como DT
Luis Piedrahita quiere ganar aún más terreno en su carrera como analista y entrenador de fútbol.
En una entrevista con PRIMICIAS revela que espera tener una oportunidad en la LigaPro y, con esa experiencia, llegar a la selección ecuatoriana.
"Mi sueño sería meter a Ecuador en las fases finales de un Mundial", dice convencido y redobla la apuesta: "Además de potenciar todo lo que tenemos a nivel mundial, más allá de un resultado, ser una potencia futbolística".
Por otra parte, Piedrahita señala que el entrenador ecuatoriano se está acercando cada vez más a la élite, con lo cual hay muchos entrenadores jóvenes con "intriga, humildad y pasión". Y destaca los ejemplos de Diego Martínez o Juan Andrés Martínez.
Lo cierto es que el ecuatoriano sueña en grande y disfruta del proceso. Un proceso que no ha sido nada fácil, pero ha tenido sus recompensas.
"Muchas veces me pasa que no me doy cuenta de todo el recorrido en el fútbol. Por eso, los entrenadores debemos darnos el tiempo y el espacio para disfrutar. Porque somos unos privilegiados".
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