A Liga le faltó 'Vitamina', pero también zinc, calcio y hasta ácido fólico
Liga de Quito ya perdió una de las dos coronas obtenidas el año anterior. ¿Habrá sustancia para al menos conservar el título nacional?
Caras largas en los jugadores de Liga de Quito, tras perder 3-1 con Lanús, el 21 de agosto de 2024.
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EFE
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El apodo del entrenador de Liga de Quito no hace justicia a lo que se ve en la cancha. La llegada de Pablo 'Vitamina' Sánchez no ha constituido el shoot multivitamínico y mineral que la 'U' necesitaba para superar el pésimo primer semestre de 2024 y demostrar que es un equipo de peso internacional.
Esto se debe a que Liga quedó tan famélica con el cambio de timón dirigencial y las 'genialidades' del pasante Josep Alcácer que no solo le faltaban vitaminas para afrontar el reto de las Copas del exterior, sino también grandes dosis de zinc, hierro, calcio, potasio y hasta ácido fólico.
Liga, por el raquitismo de su fútbol que viene desde enero, acaba de entregar la corona de la Copa Sudamericana antes de lo aceptable, tras perder la Recopa y derrapar en la Libertadores.
Ahora habrá que ver si lo que tiene basta para conservar la corona de la LigaPro, donde al menos está dando pelea en un contexto en que los equipos más importantes de Ecuador lucen mal, agotados y hasta desconcertados.
Está tan pobre el nivel de la LigaPro, que el DT de la Tricolor, el entusiasta Sebastián Beccacece, debe haberse deprimido tras la gira que realizó por los clubes del país.
Pero sigamos con Liga, cuyos refuerzos han decepcionado. Gian Franco Allala ha fallado como reemplazo de Facundo Rodriguez y ha contagiado con su lentitud a Ricardo Adé, lejísimos de ese tiempista del año anterior, al punto que alguien ya propuso que se lo llame 'Kunti' Adé.
Pero Fernando Cornejo ha sido peor, convertido en amable agente de tránsito de los rivales: a todos les dice "siga, caballero, siga".
Si no fuera porque Alex Arce está bendito de cara al gol, lo de Liga sería muy triste.
En todo caso, salir de las copas internacionales puede servir a Liga para enfocarse en la tarea de conservar la corona que le queda. O, al menos, clasificarse a la Libertadores 2025, como objetivo mínimo para salvar el año. Quizás el DT Pablo Sánchez puede encontrar algo de ginseng para ese impulso final.
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