Estas son las razones por las cuales Leonardo Campana no debe ser convocado a la Selección
El entrenador Sebastián Beccacece está presionado para incluir en la siguiente convocatoria a Leonardo Campana, del Inter de Miami.
Leonardo Campana celebra un gol con el Inter Miami, el 18 de septiembre de 2024.
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@LeoCampana9
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Existe una intensa presión, más que la que sufren los hermanos Alvarez en Guayaquil con sus gasolineras, para que Sebastián Beccacece convoque a Leonardo Campana a la Tricolor. El nuevo acicate para renovar esta puja cuasi-tóxica es el anecdótico récord de goles que Campana registra en el Inter de Miami.
¿Ser el goleador histórico de un club sin, irónicamente, mayor historia es razón para llamarlo? Por supuesto que no. Es un logro personal que tiene su valor, pero no es suficiente para justificar esta insufrible presión que, además, viene acompañada de la frase cliché que tanto les gusta en Guayaquil: "como no es de IDV, no lo van a llamar".
Pero ser o no de IDV es secundario. Estas son las verdaderas razones para no llamarlo:
1. No es mejor que Parrales
Antes que Campana, que en realidad es suplente en un equipo menor, el que merece una oportunidad es Miguel Parrales. Está en su mejor momento tanto en la definición como en madurez. Su carrera se ha visto mermada por la inestabilidad laboral, pues ha cambiado de camisetas tanto como Leonardo Di Caprio cambia de novias. Pero actualmente exhibe regularidad.
Si apelamos a la meritocracia pura (y a que de todos modos hay una carestía de centrodelanteros fiables), el 9 del Orense tendría prioridad.
2. 'Cae mal en el camerino'
Fue evidente que a Campana, cuando estuvo en la Tricolor, no le pasaban la pelota, en una especie de boicot. Si es verdad que persiste la animadversión hacia este jugador, no es conveniente llamarlo.
Beccacece mal haría en indisponer al equipo para imponer un jugador que, de todos modos, será saboteado. Lo que menos necesita es generar división en vísperas de partidos muy importantes.
Claro que Campana no tiene la culpa de las telarañas que tejan en su cabeza los demás seleccionados. Lamentablemente, la Tricolor es un equipo y los jugadores podrían exaltarse si sus estereotipos llegan a ser desafiados de esta manera. La meta es ganar los puntos, no refundar la Facultad de Sociología.
3. No cuaja con Enner
En lo futbolístico, Campana jugando con Enner Valencia equivale a preparar arroz con mango. Incomible. Ambos se anulan. Mientras 'Superman' sea el delantero estelar, lo ideal será que lo acompañen jugadores como Kevin Rodríguez, Jordy Caicedo o Jhojan Julio, o que juegue en solitario. Esa ha sido la tendencia y nada indica, salvo que Beccacece esté cocinando una revolución, que esto vaya a cambiar.
En otro supuesto, que Campana entre al cambio en lugar de Enner, lo más probable es que el guayaquileño, sin un compañero fuerte que lo secunde, no constituya mayor aporte. Y pasará lo que siempre pasó cuando entró al cambio: nada. Fue como jugar con uno menos.
De todos modos, tampoco sería una locura que se lo convoque para los partidos de octubre. Ecuador, como ya se mencionó, sufre una notable falta de delanteros, así que todo puede pasar.
Pero sería más razonable dejar tranquilo a Campana, víctima de una propaganda con cierta tendencia desestabilizadora, y permitir que Beccacece elabore la lista que más le convenga.
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