¿Quiénes son los 'oligarcas' tecnológicos del gobierno de Donald Trump y qué buscan? Estos son los detalles
Medios y ciudadanos se han referido a una supuesta 'oligarquía tecnológica' en Estados Unidos tras la cercanía de los ejecutivos de Sillicon Valley con Donald Trump. ¿Qué hay detrás de esto?
Mark Zuckerberg, Jeff Bezos, Sundar Pichai y Elon Musk en la ceremonia de investidura de Donald Trump en Estados Unidos, el 19 de enero de 2025.
- Foto
Getty Images via AFP
Autor:
Actualizada:
Compartir:
Hasta unos meses antes de que Donald Trump oficialmente se convirtió en el 47º presidente de Estados Unidos, Elon Musk era el único millonario tecnológico que se lo veía a muy cerca del republicano,
Musk, CEO de Tesla y SpaceX, fue parte de su campaña durante las elecciones, y lo apoyó ideológicamente, con la publicación de diversos posts en X, en línea con el pensamiento de Trump.
Pero el 20 de enero de 2025, la influencia de Musk y otros ejecutivos de las grandes tecnológicas con Trump fue más que evidente.
Tanto en el servicio religioso previo a la investidura de Trump, como en la ceremonia en la que el republicano juró como presidente de Estados Unidos, varios millonarios y directores de importantes empresas tecnológicas estadounidenses estuvieron 'casi tocando' a Trump.
Además de Musk, las cámaras capturaron a los siguientes 'genios' de la tecnología:
- Mark Zuckerberg Meta
- Jeff Bezos de Amazon y Blue Origin
- Sundar Pichai del gigante Google
- Sam Altman de OpenAI
- Tim Cook de Apple
- Shou Zi Chew de la red social TikTok, que estuvo a punto de desaparecer en Estados Unidos.
Un día después de que Trump juró como presidente de Estados Unidos, el republicano anunció la inversión privada de un ambicioso proyecto de USD 500 millones enfocado en inteligencia artificial ¿su nombre? Proyecto Stargate.
Este proyecto, cuya primera sede ya se construye en el estado de Texas, cuenta con el respaldo de grandes tecnológicas como:
- Las estadounidenses Microsoft y Nvidia. Esta última es el mayor fabricante de procesadores o chips.
- La británica Arm, también productor de semiconductores, tan necesarios para el despegue de la inteligencia artificial.
- La japonesa Softbank, especializado en hacer caminar a las 'start up' de Sillicon Valley.
- El poderoso fondo de inversión tecnológico saudí MGX.
Pero ¿en qué momento se acercó Sillicon Valley tanto al republicano Donald Trump, que entre sus varias posturas se encuentra la de considerables cambios a la política migratoria y comercial de Estados Unidos?
Musk: De empresario a funcionario de Trump
La relación entre Musk y Trump no es nueva ni reciente, aunque en años anteriores ha tenido altibajos.
Era 2016, en la primera administración del republicano, que Donald Trump designó a Elon Musk como parte del Foro Consultivo del Presidente en materias económicas, junto al entonces director ejecutivo de Uber, Travis Kalanick.
Según había expresado Musk, empresario sudafricano con nacionalidad canadiense y estadounidense, en la primera reunión tenía previsto exponer sus “objeciones” respecto a las políticas migratorias implementadas por Trump entonces.
Años después, en 2020, el republicano se refirió a los logros de Musk con Tesla (autos) y SpaceX (cohetes espaciales) y señaló al magnate como “uno de nuestros mayores genios”.
En ese mismo año, Trump publicó en su todavía frecuentemente usada cuenta de Twitter, que el estado de California permitir la reapertura de la planta de Tesla en esa jurisdicción, en medio de las restricciones por la pandemia de Covid-19. Algo que Musk agradeció de manera pública.
Varios años más adelante, durante las campañas de 2024, el republicano adelantó que el multimillonario sudafricano estaría a cargo de un nuevo departamento en el poder ejecutivo, llamado Departamento de Eficiencia Gubernamental o DOGE.
Al ser Musk la cabeza de esta institución, el magnate podrá incluso acceder a documentos clasificados, según se conoce por lo establecido en la orden ejecutiva que Trump firmó el primer día que formalizó DOGE.
Zuckerberg, Altman y Bezos, ahora 'amigos' de Trump
Meta, la empresa de Mark Zuckerberg, fue una de las empresas (junto a Amazon) que por cuenta propia decidió donar USD 1 millón para la ceremonia de investidura de Trump.
Semanas después de conocerse la donación, Zuckerber anunciaba que Facebook e Instagram abandonan el programa de verificación de datos (fact-cheking), “empezando por Estados Unidos”, pues aseguraba que estos provocaban la “censura” de contenidos.
“Es momento de que regresemos a nuestras raíces respecto a la libertad de expresión”, fueron las palabras de Zuckerberg.
Organizaciones de derecho digitales como la Electronic Frontier Foundation (EEF) rechazaron lo ocurrido.
Estos cambios, según se aprecia en la nueva política de odio de Meta, permiten que se puedan emitir insultos a usuarios basados en género.
En medio de todo también están las expresiones públicas que han demostrado los directores ejecutivos de OpenAI y de Amazon, es decir, Sam Altman y Jeff Bezos.
El primero, por ejemplo, publicó el 22 de enero, tras la investidura de Trump, que había “cambiado su perspectiva” respecto al presidente republicano, y que “hubiera deseado haber pensado más por mi cuenta” tras reconocer que cayó en la trampa ‘NPC’.
NPC es un término que, según recoge un artículo del New York Times y glosarios de jerga moderna en internet, fue popularizado por Trump.
Toma prestado el significado nacido en los videojuegos (de ‘nonplayable character’) para describir a quien no posee un pensamiento independiente, por lo general atribuido a los liberales, que en Estados Unidos suelen ser vistos en el lado izquierdo del espectro político.
A esto se suman que el propio Altman difundió el 17 de enero una carta que le enviaron dos senadores cuestionando la donación que hizo a la ceremonia de inauguración de Trump.
“Es curioso que nunca me enviaron una de estas por contribuir a los demócratas”, añadió en un comentario el responsable de OpenAI.
Por último, en un evento económico del New York Times en diciembre de 2024, Jeff Bezos afirmó que estaba “muy optimista en que el presidente Trump habla en serio en reducir la regulación”, tras señalar que, “si puedo, lo ayudaré, porque tenemos mucha regulación en este país”
Visas H1B y escrutinio gubernamental
En medio de la cercanía de la llamada "oligarquía tecnológica" con Donald Trump también hay un detalle migratorio, que podría estar detrás de la amistad estrecha entre estos personajes.
Si bien el republicano ha adoptado políticas más estrictas para quienes lleguen a Estados Unidos de manera irregular, Trump se ha mostrado a favor de una visa en particular, la H1B.
Esta es frecuentemente usada por empresas estadounidenses de gran tamaño, incluidas las tecnológicas, para contratar a profesionales extranjeros especializados, una razón para que los magnates de Sillicon Valley sean amigos de Trump.
En declaraciones al New York Post, Trump expresó que siempre le "han gustado" estas visas y que está "en favor de ellas".
"Por eso las tenemos", añadió, mientras que Musk se ha expresado a favor de la visa H1B.
Además, existe un detalle no menor que se encuentra en el comunicado que Altman compartió firmado por dos senadores, quienes no han desmentido lo publicado, y han hecho reiteradas críticas públicas a la cercanía de Trump con las tecnológicas.
En el documento, los senadores Elizabeth Warren y Michael F. Bennet afirman que las compañías de Bezos, Cook, Pinchai, Zuckerberg, Altman, así como de Satya Nadella (Microsoft) y Dara Khosrowshahi (Uber), han sido señaladas por denuncias de prácticas anticompetitivas o monopólicas y acciones regulatorias.
Todas estas (o sus directores ejecutivos) realizaron donaciones para la ceremonia de investidura de Trump de USD 1 millón cada una, según la organización Public Citizen.
Compartir: